Abaten un jabalí colorado con unos impresionantes colmillos en una batida entre amigos
El macho no solo destaca por el singular color de parte del manto, también lo hace por sus largas y gruesas defensas. Fue cazado en una finca abierta situada en Albaladejo, municipio perteneciente a la comarca del Campo de Montiel.
Una vez abatido el jabalí, como siempre hace desde el año 2015, el cazador señaló con uno de sus dedos al cielo para brindar el abate del ejemplar a Juanma, rehalero que perdió la vida a los 31 años en un fatídico accidente, y a su padre Paciano, fallecido hace siete años.
El cazador nos enseña el peculiar jabalí recién abatido.
Abate el jabalí con el rifle que le regaló su padre fallecido
Pedro Martínez está acostumbrado a cazar ejemplares medallables, pero este jabalí es especial para él al haberlo capturado con el arma que le obsequió su padre hace 20 años. El 28 de enero el jiennense viajó hasta Ciudad Real para disfrutar de un día de caza mayor junto a un grupo de amigos. Al montero le tocó en suerte el puesto número 8 de la traviesa de la cacería. La postura estaba ubicada en una zona elevada.
El jabalí cayó sin vida poco después de recibir el disparo.
Nada más soltar los perros, Pedro abatió uno de los cuatro integrantes de una piara. Se trataba de una cochina de gran tamaño. Transcurrida una hora de la batida, indultó a una hembra acompañada de rayones. El jabalí colorado fue levantado por los perros en un barranco. Antes de llegar al montero, lo erró un puesto y pasó por otro sin que lograran verlo. Pedro escuchó sus patas pisando monte para desplazarse entre la espesura. Lo dejó cumplir, para herirlo mortalmente entre unas encinas. El macho se derrumbó a 50 metros del lugar del lance.
Javier Fernández
