Así se prepara una montería de cochinos en una finca abierta
Un grupo de cazadores lleva varios meses cuidando de una mancha en la que el pasado año se abatieron varios ejemplares con unos importantes trofeos. Su objetivo, repetir el éxito alcanzado la pasada temporada.
Los organizadores de la montería, al igual que el pasado año, prefieren mantener su identidad y la ubicación exacta de la finca en el anonimato. Su intención a la hora de realizar esta publicación no tiene fines comerciales, simplemente intentan compartir con otros cazadores sus experiencias.
¿Cómo lograr una gran montería de jabalíes en una finca abierta?
Los cazadores llevan años mejorado el hábitat para que los cochinos encuentren en el acotado condiciones óptimas y permanezcan en él. Extreman la vigilancia contra el furtivismo para evitar las incursiones de los amigos de lo ajeno. Vigilan el terreno las 24 horas del día, por medio de patrullas de vigilancia y mediante la colocación de cámaras de fototrampeo para la detección de los furtivos. Uno de estos dispositivos ha grabado a uno de los enormes jabalíes que esconde la mancha.
Aporte de alimentos y uso de atrayentes naturales con el objetivo de mejorar el hábitat
El otro pilar para lograr un rotundo éxito en la celebración de la cacería es proporcionar comida a la fauna en los momentos de escasez, siempre atendiendo a los planes técnicos de caza autorizados y a la legislación vigente en la comunidad autónoma en la que está ubicado el coto. Los cazadores hacen uso de atrayentes naturales para la localización, observación y conteo de las especies. Su utilización les permite obtener datos para gestionar con efectividad el coto.
Normalmente, estos productos están compuestos por maíz triturado, cereales variados, melaza, sal, aromas naturales, aceites esenciales, productos a base de soja y sustancias salivales o urinarias de jabalí.