Un perro guardián salva a un ganso del ataque de un zorro
Un zorro entra en una finca para intentar matar y llevarse alguna de las aves que hay allí. Pero el ave logra llegar hasta un perro guardián que le salva la vida. Un vídeo que tienes que ver.
Los zorros demuestran su descaro entrando en granjas, siembras y gallineros para cometer sus tropelías. Incluso a plena luz del día y con perros guardianes protegiendo a los animales que allí hay. Es lo que sucede en este vídeo, grabado por una cámara de seguridad, en el que vemos a un ganso en problemas por el ataque de un zorro.
El ave lucha por su vida, incluso le planta cara al depredador expandiendo sus alas para parecer mayor en tamaño, pero su perseguidor no se deja impresionar. Por suerte para el ave, hay un enorme perro guardián, un kangal turco, atado cerca de allí.
El perro consigue frenar al zorro
Lo único que salva al zorro es la cadena que sujeta al perro, algo que parece saber la alimaña, que llega hasta el límite en el que queda fuera del alcance del can. El hambre de este zorro debe ser muy aguda, porque su atrevimiento es algo que roza la temeridad. Finalmente, cuando acepta que se le ha escapado la cena al estar protegida por el gran perro pastor, da media vuelta y se aleja de allí.
El zorro: la pesadilla de los gallineros
Cuando uno de estos animales logra entrar en un gallinero, si tiene el tiempo necesario, no dejará un ave con vida. Tras dar rienda suelta a su instinto depredador, intentará llevar consigo el mayor número de las que ha matado. Incluso irá dejando algunas por el camino a su madriguera para volver a recogerlas más adelante.
Pero no solo las gallinas son víctima de los zorros. Las anátidas también se convierten en su objetivo. Y si en el corral hay más de cien patos, un solo zorro los matará a todos en unas horas.
Esto es capaz de hacer un zorro en una granja: más de 150 patos muertos en una noche
Porque la fuerza de sus mandíbulas y su insistencia les llevará a conseguir romper una verja o vallado metálico o incluso treparlo. Y, si no lo consiguen, son capaces de sorprender entrando entre los huecos de los alambres. Un vídeo consiguió grabar la capacidad impresionante de un ejemplar al que una malla no consigue frenar.
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