Los mejores regates del mundo los hace esta liebre

Nueve regates en tan solo 25 segundos. La exhibición que realiza esta liebre ante el lebrel deja boquiabierto a todo aquel que presencia la escena. Los animales se encuentran en una zona desértica, probablemente en un país africano o de oriente medio.

Si atendemos a la raza del perro que intenta desesperadamente atrapar a la liebre, podríamos estar en su zona de origen. El sloughi o lebrel bereber nació y se desarrolló en el norte de África. Marruecos, sobre todo, pero también Túnez y Libia son los países donde más presencia ha tenido desde su nacimiento como perro de caza a la carrera, aunque mucho cinófilos sitúan los ejemplares más remotos en zonas donde hoy se encuentra Etiopía.

La liebre ibérica: 100 metros en menos de cinco segundos

La velocidad no lo es todo para escapar del galgo

Una liebre adulta es capaz de desarrollar velocidades de 70 kilómetros por hora en situaciones en las que el suelo, la orografía y la vegetación permiten desplegar sus mejores armas velocísticas. El sloughi es capaz de alcanzarla, momento en el que la liebre africana hace uso del recurso más eficaz de la especie: los regates.

Una y otra vez, esquivar la acometida del galgo africano le sirve a la rabona para seguir con vida. Quizás es por esto por lo que no intenta alejarse de aquel lugar y continúa ‘regateando’ al perro. El suelo arenoso también puede ser una de las posibles razones por las que la liebre no confía en su velocidad. Sus patas se hunden en el irregular suelo, y prefiere hacer lo que acabamos de ver.