Un cazador salva a un lebrato tras ser capturada su madre por un galgo
Liebre

Un cazador salva a un lebrato tras ser capturada su madre por un galgo

La intervención de un cazador onubense ha evitado que una liebre con escasos días de vida perezca de frío e inanición. El cazador encontró la cría en el lugar que unos galgueros levantaron a la madre.


A tenor de lo ocurrido, parece que algunos galgueros se resisten a cumplir las indicaciones del Centro de Investigación Apícola y Agroambiental de Marchamalo, situado en la provincia de Guadalajara. Los investigadores recomiendan vedar la caza de la liebre esta temporada por el alto porcentaje de hembras preñadas a las alturas de mes en la que nos encontramos. En una jornada de captura de rabonas vivas para su control, desparasitación y marcado con microchip, los científicos detectaron que el 60% de las hembras manipuladas se encontraban en estado de gestación.

La experiencia del cazador le llevó a saber que allí estaba el lebrato

El pasado domingo, un cazador de la provincia de Huelva estaba en un puesto de caza de zorzales al paso cuando presenció cómo un galguero liberaba a una collera de galgos tras levantarse una rabona de su lugar de encame. Los galgos lograron capturar a la liebre. Ante la cercanía de los galgueros, el zorzalero los escuchó comentar que el ejemplar tenía las mamas llenas de leche. Cuando estos se alejaron de la zona, el cazador se dirigió al sitio donde vio levantarse la liebre. Algo le decía que las crías de la orejona no debían andar muy lejos.

No paró hasta encontrar al lebrato

Tras inspeccionar minuciosamente un cultivo encontró a un único lebrato macho junto a una cepa. Lo cogió entre sus manos, no podía dejarlo allí. Sabía que la cría estaba condenada a una muerte segura. Desde ese día, la familia del cazador está intentando sacarla adelante con la intención de liberarla cuando sea posible. La alimentan, procuran que esté caliente y tranquila.

La liebre pare varias veces al año

Una liebre adulta tiene una media de entre de 3 y 4 partos al año. La mayoría de las hembras paren a principios de primavera y verano. Si las condiciones les son favorables, como está ocurriendo este otoño, es habitual encontrar liebres con crías o preñadas en estas fechas.

 


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