Graban una nidada de perdiz roja con 28 pollos en una finca de Sevilla
Se trata de una puesta de récord. A pesar de las condiciones extremas en las que se encuentra el campo español, dada la escasez de precipitaciones, las perdices están sacando adelante sus polladas con éxito gracias a la ayuda de los cazadores.
Esta temporada, uno de nuestros colaboradores habituales en la provincia de Cádiz nos ha enviado las imágenes de un bando que contaba con 22 pollos.
Tanto esta nidada como la grabada esta semana en una finca de Morón de la Frontera, municipio situado en la provincia de Sevilla, son puestas con un número de perdigones fuera de lo normal. Según una publicación del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, los bandos están normalmente compuestos por, "una pareja de adultos y los perdigones en número que no suele llegar a 16".
¿Por qué pierden tantos pollos de perdiz estos bandos?
La depredación, las inclemencias meteorológicas y las cosechadoras son las principales amenazas de los pollos de perdiz roja. Un informe publicado por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación estima que, "una pareja sólo logra sacar adelante de un 30 a un 35 por ciento de sus crías". Esta publicación asegura que "la media de huevos que pone una pareja se puede cifrar en 14 y los nidos aprovechados representan, en muchas de las experiencias realizadas, el 35 por ciento de los construidos; el 10 son abandonados y el 55 destruidos por depredadores terrestres menores. En las experiencias controladas por la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha, los depredadores capturados fueron un 77 por ciento lirones; un 14 ratones; un 7 culebras y un 2 lagartos. Frecuentemente hay que contar también con daños producidos por zorros, águilas, alcotanes, etc".
El ganado lanar y cabrío pisa muchos nidos de perdiz
Este mismo texto también asegura que el ganado doméstico es el culpable de que se malogren muchos nidos de patirroja. Asimismo, nombra como causantes de la pérdida de nidos al, "granizo y las lluvias torrenciales de primavera, al igual que las segadoras de forrajes y cosechadoras de cereales, destruyen nidos, rompen huevos a su paso y arrollan a multitud de polluelos".