Este ciervo no sabe con quién se está metiendo
El ciervo, a pesar de la gran diferencia de tamaño y peso, no se amilana en ningún momento a la hora de enfrentarse a un novillo. La época de celo le lleva a encontrar oponente en un animal mucho mayor que él.
El cérvido pugna con el toro, que parece manso, haciendo chocar sus cabezas y finalmente haciendo huir al bóvido, que parece muy desconcertado.
A veces el tamaño no importa
A pesar de la diferencia de peso entre un ciervo adulto, entre 75 y 150kg, y el de un novillo, unos 500 kilos, el cérvido no duda en enfrentarse con él, que se encuentra en uno de los corrales de una granja, al aire libre.
Tras entrechocar sus cabezas, el bóvido comienza a recular eludiendo el enfrentamiento, a pesar de que su corpulencia y un mínimo de resistencia le llevaría a vencer en tal contienda. Pero el encelado ciervo persiste en su intento y le lleva a retroceder hasta que finalmente se retira de la pelea.
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