Un perro de caza monta a una jabalina en celo
Los enemigos, en ocasiones, pueden llegar a intimar. Que se lo digan a este perro de caza, que debería ladrar y acosar al jabalí y, en su lugar, da rienda suelta a su pasión e intenta montarlo sin descanso.
Los jabalíes entran en celo a finales de otoño y principios de invierno. Se prolonga durante 23 días, en los que las hembras se muestran receptivas a los machos de su misma especie. Lo hacen desde su primer año de vida, puesto que son muy prematuras a la hora de alcanzar la madurez sexual. Este es uno de los motivos del aumento de sus poblaciones en la mayoría de los campos y montes de nuestro país.
Un perro que no caza, seduce
Pero lo que no es ni remotamente normal es que una jabalina se preste a ser montada por un perro. Y mucho menos usual, que el can pertenezca a las razas de caza de su especie. Aquí todo choca y estas imágenes se han convertido en un fenómeno viral desde que se publicaron por primera vez en el perfil de un usuario búlgaro de TikTok.