Graban a un lobo al pie de una transitada carretera asturiana

Las nevadas, aunque pintorescas, han generado escasez de alimentos para los lobos en su hábitat natural. Este fenómeno ha llevado a estos depredadores a aproximarse a áreas más cercanas a las poblaciones humanas en busca de fuentes alternativas de alimento. Como resultado, algunos conductores han informado de encuentros inesperados con lobos a lo largo de las carreteras locales. En el siguiente vídeo, grabado por un conductor en una carretera del concejo asturiano de Aller se puede apreciar con gran claridad el imprevisto encuentro con un lobo en una carretera local

Riesgo de colisión

Uno de los problemas más evidentes es el riesgo de colisiones entre vehículos y lobos. La baja visibilidad causada por la nieve y las condiciones climáticas adversas hace que sea difícil para los conductores detectar la presencia de estos animales salvajes en las carreteras, aumentando el peligro de accidentes. Además, los animales salvajes no están familiarizados con el tráfico vehicular y pueden reaccionar de manera impredecible al estrés o al miedo. Las colisiones entre vehículos y lobos pueden resultar en lesiones o la muerte tanto para el lobo como para los ocupantes del vehículo.

Su hábitat natural está lejos de las poblaciones

En circunstancias normales los lobos viven en lugares lejos de carreteras y asentamientos humanos. Concretamente en la Cordillera Cantábrica ocupa (o más bien, ocupaba) las zonas más altas. En general, el lobo ibérico (Canis lupus signatus), habita en una amplia variedad de ecosistemas, desde bosques densos hasta áreas montañosas y páramos. Algunas de las características del hábitat natural del lobo ibérico incluyen bosques templados, áreas de montaña y zonas con vegetación dispersa. También se pueden encontrar en zonas húmedas ya que la presencia de fuentes de agua, como ríos y arroyos, es esencial para estos animales., Es importante destacar que el lobo ibérico es una especie adaptable y puede ocupar una variedad de hábitats siempre que haya suficiente disponibilidad de presas y recursos para su supervivencia.

Con la nieve, se acercan a las poblaciones

La nieve, que transforma el paisaje en un cuento invernal, parece tener un efecto inusual en el comportamiento de estos animales. Expertos en fauna silvestre sugieren que, durante el invierno, la búsqueda de alimentos puede volverse más desafiante para los lobos. La nevada puede dificultar la caza de presas salvajes ya que les supone un mayor gasto de energía. Los lobos se acercan entonces a áreas pobladas en busca de fuentes alternativas de alimento, como son los animales domésticos. Para desgracia de ganaderos y habitantes del campo, estos se adaptan fácil a la presencia humana y asocian las áreas urbanas con fuentes de comida más accesibles.

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