Una muestra interminable ante un conejo
Pocas veces podemos asistir a cada retazo que conforman un lance completo de caza al conejo con perro de muestra. Este vídeo es una de ellas.
Un pachón navarro ha quedado petrificado en una preciosa muestra. Quienes no conozcan la raza heredera del antiguo perro de muestra español al que mencionaban los autores clásicos en sus escritos, se sorprenderán de la efectividad de estos perros en la caza del conejo. Su búsqueda, muy adaptada a los terrenos abruptos donde encuentra su cobijo el lagomorfo, caracterizada por ese trote vivaz y de ritmo constante, cubre el monte y los espacios de labor de manera ligera y sin dejar de inspeccionar las querencias que aprenderá de la experiencia.
Un perro para disfrutar de la caza
Es muy resistente, valiente para entrar en la maleza y suele permanecer pendiente de la escopeta, convirtiéndole en un compañero ideal para aquellos cazadores que gustan formar un equipo compenetrado con su perro y disfrutan de cada momento de su trabajo.
Es el claro ejemplo de Javier Torrico, colaborador habitual de la sección canina de Club de Caza, que en esta ocasión comparte con nosotros un lance inolvidable protagonizado por Rubio, un gran ejemplar de esta raza de perros mostradores ibéricos. Una “muestra eterna”, como así la define el cazador, que termina de una espectacular manera y que lleva el conejo al zurrón y permite este impresionante vídeo de caza.
Espectacular muestra de un pachón navarro ante una perdiz
Un disparo efectivo que frena la segunda carrera del conejo da lugar al cobro de la pieza abatida. Una labor en la que los pachones navarros destacan desde muy jóvenes. Aunque haya ejemplares en los que hay que pulir esta faceta a través del adiestramiento, la raza suele demostrar una entrega innata, muy en consonancia con su docilidad y capacidad de agradar a su propietario.