Caza un jabalí de 140 kilos con unos impresionantes colmillos en un coto social de Alicante
Dado el descomunal tamaño del animal abatido, ha hecho falta el uso de una carretilla para trasladar al macho hasta el lugar en el que los cazadores tenían aparcado el vehículo. El cochino no solo destaca por su peso, también lo hace por el largo y el grueso de los colmillos y amoladeras.
Este impresionante ejemplar ha sido abatido por el cazador alicantino de 30 años de edad David Muñoz, apodado Willy. Cabe destacar que hace menos de un mes cazó otro animal de las mismas características en el mismo lugar del coto en el que ha sido abatido este formidable macho. La medición en frío de los colmillos del cochino que abatió anoche el cazador valenciano es de 19,4 centímetros de longitud y 3,1 de grosor, la navaja izquierda, mientras que la derecha ha alcanzado los 20,1 centímetros y 3 de ancho.
El enorme cuerpo del cochino junto al coche del cazador.
El cazador vio por primera vez las huellas del jabalí la mañana del día de su abate
Esperista y rehalero. Estas son las dos modalidades de caza que apasionan a este cazador valenciano. David es propietario de una rehala de perros desde hace más de una década. Compuesta por canes de las razas podenco xarnego, campanero, jagd terrier y poitevino. El valenciano, a pesar de su corta edad, cuenta en su haber con más de 300 bocas.
Imagen de esta mañana, cuando el cazador ha encontrado al gran jabalí. El disparo resultó letal incluso para este enorme jabalí.
El rehalero y su padre, Jacinto, detectaron la presencia del jabalí en un viñedo la mañana de ayer. Anoche pensaban realizar una espera en otra zona del acotado, pero finalmente decidieron tratar de abatir al cochino que había dejado esas enormes pisadas. Padre e hijo se colocaron en el puesto a las 20:15 horas. Dos horas más tarde visitó la viña una piara de jabalíes compuesta por 15 ejemplares.
Este es el trofeo del gran jabalí de 140 kilos. A la derecha, jabalí abatido en el mismo sitio el mes pasado y que pesó 110 kilos, con 21 centímetros y 3.2 de grosor.
A las 23:30 los cazadores vieron el macho desplazándose por la misma vereda por la que había accedido el grupo de cochinos a las uvas. Antes de penetrar en el cultivo se detuvo en un rastrojo de cereal.
Abate al jabalí de un certero disparo a 411 metros de distancia
A pesar de que el cochino estaba muy alejado del apostadero, según la medición del telémetro de David, a más de 400 metros, el alicantino lo centró en la cruz del visor de su rifle de cerrojo Mauser M18 del calibre 7mm RM.
Apretó suavemente el gatillo. La bala voló hasta detenerse en el codillo del animal. A pesar de impactar en un punto vital el jabalí salió corriendo. Con buen criterio el cazador decidió posponer su búsqueda a la mañana de hoy. Nada más amanecer, padre e hijo, acompañados de Kali, un perro cruzado de tres años, fueron a buscar al macareno. Los cazadores encontraron al macho sin vida a 100 metros del lugar del lance. Se trata de uno de los cochinos de mayor tamaño y trofeo abatido en la trayectoria cinegética del cazador.
El cazador y su padre con el jabalí abatido.
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Antonio López Espada y Javier Fernández
