Suerte dispar entre los cazadores en la apertura de la caza de la codorniz
Aquellos que comenzaron la temporada en zonas en las que los rastrojos tenían altura o en terrenos de riego, en los que se cultivan plantas como algodón o alfalfa y con cauces de agua cercanos levantaron un número aceptable de codornices. En cambio, los cazadores que cazaron en pajonales cortados a ras de suelo apenas levantaron pájaros.
A pesar de la insistencia por parte de determinados colectivos animalistas en la prohibición de la caza de la codorniz, datos como los publicados por la Junta de Castilla y León desmontan las mentiras vertidas por estos grupos. Los resultados de capturas de codornices de temporadas anteriores, según los valores comunicados por los titulares de los cotos de caza, revelan que el número de aves abatidas en la última década se ha mantenido. La media de codornices cazadas en este periodo de tiempo ha sido de 530.000.
La temporada pasada fueron capturadas 513.000 en la comunidad autónoma. Estos datos, según la junta, indican que, "la evolución de los resultados de capturas de codorniz en las últimas diez temporadas presenta una tendencia estable, dentro de una horquilla cuyos valores mínimos y máximos han estado en torno a los 400.000 y 600.000 piezas de caza".
"Un buen año de cría de codornices en la zona centro y el norte de España"
Las codornices que llegaron a la Península Ibérica en primavera han encontrado un entorno favorable gracias al esfuerzo realizado por los cazadores. Estos han mejorado el hábitat, han proporcionado agua a las aves y destinado siembras exclusivamente para alimentar a la fauna. Colaboradores de Club de Caza hace escasas fechas informaron cómo se había desarrollado el periodo de cría de la especie.
El día posterior a la apertura de la temporada también se han puesto en contacto con la redacción de este medio digital para narrarnos sus vivencias la fecha de la celebración de la Asunción de la Virgen. Todos ellos coinciden en que sus perros han levantado un importante número de pájaros. Muchos de ellos agrupados en bandos, de entre 4 y 6 individuos. Los cazadores entrevistados han cazado en Palencia, Zaragoza y Navarra.
Según los datos publicados por la Junta de Castilla y León, en la provincia palentina se abaten cada año el 16% de las capturas de esta especie en la comunidad. Burgos es la región en la que se realizan un mayor número de capturas, con un 36% del total.
Javier Fernández
