70 años de calidad alemana

De la mano de Natalia López y Ander Risco, de Beretta Benelli Ibérica, y guiados en todo momento por Peter Meissner y Thomas Lippmann, ambos de Steiner, se realizó una visita a la fábrica, analizando todas las fases de producción, desde el inicio del pulido de las lentes, hasta las pruebas finales que determinan la calidad y condiciones óptimas para sacar a la venta dichos productos.

La jornada comenzó con una presentación del Grupo Beretta en general y, de manera más profunda, sobre Steiner en particular.

Comenzando con una explicación sobre Beretta, la armera más antigua del mundo, la cual comenzó en 1526 y el grupo de empresas que conforman Beretta Holding, tales como Steiner, Burris, Benelli, Sako, Tikka, etc… así como de una serie de datos financieros en cuanto a facturaciones pasadas y previsiones futuras, se pasó directamente a tratar datos concretos sobre la división de óptica, reflejando datos de venta como por ejemplo que:

• Se comercializa en 80 países
• El 80% de su producción es para exportación
• La división de óptica se divide en 3 empresas

Se continuó aportando datos sobre los distintos segmentos venta y gama de productos.

Por último, y antes de pasar al recorrido por la fábrica, se explicó brevemente la historia de Steiner, desde su creación en 1940 hasta la fecha actual, comentando las principales novedades y patentes que han ido generando a lo largo de todos estos años.

Como curiosidad, Steiner incorporaba en sus comienzos una división de cámaras fotográficas, pero al existir demasiada competencia en la época, decidió cambiar la estrategia y dedicarse en exclusiva a lentes y binoculares.

Una de las salas contenía un pequeño museo de los productos que ha diseñado, producido y sacado a la venta en todos estos años. En ella se podía ver en una vitrina la cámara fotográfica que fabricó en sus inicios.

Del mismo modo y como curiosidad, se mantiene en una vitrina un binocular rescatado de un bombardeo procedente la guerra del Golfo en 1992, que todavía conserva sus propiedades ópticas.

RECORRIDO POR LA FÁBRICA

Pulido de las lentes:

Al entrar en la sala de pulido de las lentes, lo primero que llama la atención es lo alejado que está todo el proceso de las cadenas de fabricación y montaje en serie. Aquí, todo tiene un alto componente humano, siendo esto, según los propios técnicos de Steiner, un factor muy importante para el tamaño de su fábrica, ya que frente a cualquier variación en las necesidades de producción, la línea de producción puede cambiarse en un tiempo muy reducido.

Las lentes, a diferencia de otras fábricas de grandes producciones, en las que se compran bloques de cristales para obtenerlas por corte, en Steiner son compradas ya cortadas a Schott, evitando así todos los engorrosos y complicados procesos de eliminación de polvo de cristal.

Las lentes se van puliendo por distintas máquinas (las primeras para darles forma y tamaño) y posteriormente para conseguir el pulido final. El proceso de pulido total de una lente conlleva alrededor de unos dos minutos, un minuto de pulido final por cada una de sus caras (en función del tamaño de la lente). Cada lente, en función de para lo que esté destinada, lleva un proceso de pulido en distintas fases y por distinta maquinaria.

Primeramente se le da un desbastado hasta darle la forma y tamaño necesario, siendo comprobadas sus medidas concienzudamente.

Para posteriormente pulirse hasta su fase de comprobación definitiva.

Se puede observar la diferencia entre la lente en su fase inicial y totalmente pulida y preparada para su control final.

Para finalizar, las lentes se introducen en una máquina especialmente diseñada para su control de calidad (pulido, rallado, etc.). La lente se fija perfectamente centrada en un haz de luz. La imagen se refleja en un monitor, pudiendo llegar a observar las posibles deficiencias en el proceso de pulido. Cuando el pulido no ha sido eficaz, suelen aparecer anillos concéntricos; con más de cinco anillos, la lente es rechazada.

Tras este test, el 100% de las lentes pasan a una revisión visual por técnicos especializados en detectar cualquier anomalía en el pulido. Después de las fases de pulido, y de todos los controles de calidad, aproximadamente el 2% no pasan los filtros, siendo rechazadas para su montaje en cualquier equipo.

Pulido de los prismas:

Al igual que con las lentes, con los prismas se realizan distintos procesos de pulido por todas y cada una de sus caras.

La maquinaria empelada para el pulido de los prismas, es capaz de realizar el pulido de varios prismas a la vez, debiendo estar por cada una de sus caras durante 20 minutos.

El control de calidad de los prismas es idéntico al de las lentes, sufriendo un rechazo similar al 2%.

La producción diaria, una vez pasado los controles de calidad son de aproximadamente unas 100ud de lentes y 100ud de prismas.

Tratamientos multicapas

El tratamiento de multicapa es el más crítico de todos y es realizado por técnicos altamente cualificados, estando además muy bien valorados por la empresa. Es en esta fase, donde se marca la gran diferencia entre unas marcas y otras, ya que aunque la calidad de los cristales de las lentes puede ser de gran calidad, no todas las empresas someten a sus lentes a este tipo de tratamientos multicapas, ni con los mismos estándares de calidad en sus procesos.

El tratamiento consiste en ir superponiendo distintas capas para con ello, evitar defectos de visión tales como pérdida de luz, nitidez, reflejos, etc.

Todo este proceso se realiza en “una sala limpia”, a la que no nos fue posible acceder por el riesgo de interferencia en los distintos procesos.

Todo el personal que trabaja en esta fase, va especialmente protegido para evitar contaminar las lentes y todos los tratamientos a los que se someten.

La extracción de las lentes de la “sala limpia” se realiza a través de una puerta estanca, que da acceso a una vitrina móvil para el traslado de las lentes hasta su montaje.

Se puede observar la diferencia existente dentro de una misma lente, de la nitidez y brillo de una zona con un tratamiento a capa y el resto de la superficie sin tratamiento (la zona central está con tratamiento y la zona exterior sin él).

Steiner otorga un tratamiento de hasta 20 capas por lente.

Montaje de los equipos. Binoculares

La sala de montaje está compuesta por numerosos puestos de trabajo, en los que en cada uno se realiza una función muy específica.

Por aquí van pasando por las distintas fases de montaje, como son:

Instalación de prismas.

Montaje de carcasas.

Ajuste de dioptrías.

Relleno de Nitrógeno, a 1,5 bares de presión, extrayendo por una válvula el aire mientras que por otra se inyecta el nitrógeno. Posteriormente se introduce en una cámara para comprobar su perfecto llenado y las posibles pérdidas.

Instalación de compás en el modelo de binoculares Navigator.

Montaje de los equipos. Visores.

En el montaje de los visores se utilizan los mismos procedimientos adaptados a las necesidades de este producto. En este caso no se nos permitió sacar fotografías del centrado de todas las lentes

Test, validaciones y control de calidad

Una vez finalizado todo el montaje, habiendo pasado cada una de sus piezas fundamentales sus propios controles de calidad, éste es el paso definitivo y previo antes de la entrega al cliente. Este último control conlleva:

Revisión general de sellado de carcasas y visión general: Se realiza al 100% de los productos.

Someterlos a un fuerte gradiente de temperatura pasando de estar 1 hora a 70ºC a -36ºC. Esta prueba se realiza a un 10% de las unidades.

Estanqueidad. Se somete a un 10% de las unidades a esta prueba.

Comprobación de pérdida de colimado después de golpes. Se somete a un 10% de las unidades.

Trasmisión de luz: Se aplica igualmente al 10% de las unidades. Se consigue el 96% en una constante, no solo en picos de máxima transmisión.

Otro tipo de pruebas específicas, sobre todo para el mercado militar, aunque en algunos casos se testean también los visores civiles, son pruebas de retroceso, pruebas de caída desde 122cm de altura, exceso de humedad, exceso de altitud, etc.

PRESENTACIÓN DE TODA LA GAMA DE PRODUCTOS

Una vez finalizado el recorrido por la fábrica, ya por la tarde, la idea inicial era realizar una prueba de varios modelos de visores en un campo de tiro habilitado para la empresa, pero las fuertes lluvias impidieron realizarlas, por lo que se sustituyó por una última presentación en una de las salas de reuniones, en donde se nos mostró con mayor detalle los modelos de la gama Hunting.

Prismáticos de caza:

Highthunter 8x56. Se tratan del producto estrella de Steiner dentro de la gama de caza y son capaces de aportar una transmisión de luz del 96%. Otra característica a resaltar es el sistema autofocus que, una vez se hayan ajustado ambos oculares, queda ya perfectamente enfocado a todas las distancias (desde 20m al infinito). Comentar, que para el año 2018 se prevé sacar el modelo en 10x56, sin aumentar ni peso ni tamaño.

Binoculares con medidor de distancia LRF 1700 (8x30 y 10x30). Ofrecen mediciones precisas incluso por encima de los 1.700 metros, disponiendo de un doble modo de medición, uno convencional y otro en modo de escaneo, leyendo simultáneamente las distintas distancias.

Ranger Xtreme (8x56, 10x42, 8x42 y 8x32). Se corresponde con su gama media conservando una transmisión de luz del 92%, a la que suman una reducida distancia de enfoque (<2m)

También se expusieron modelos como los Wildlife y los Observer.

Visores de caza:

Ranger (1-4x24, 2-8x42, 3-12x56 y 4-16x56). Se trata de la gama media de visores de la gama Steiner

Nighthunter (1-5x24, 1,6-8x42, 2-10x50 y 3-15x56). Es la gama alta de visores, los cuales ofrecen unas cualidad de la máxima calidad con precios contenidos (en el entorno de 1800€). Con motivo del 70 aniversario, Steiner ha sacado a la venta una edición limitada de estos modelos.

Para mayor información de la gama de productos Steiner, recomendamos visitar sus direcciones de Internet.

https://www.bbi.es/

https://www.steiner-optics.com/