Las Jornadas se cerraron con noventa y un asistentes, la mayor parte universitarios, estudiantes de Montes y Forestales, aunque también asistieron guardas, gestores y aficionados
Al igual que en ediciones pasadas el curso fue todo un éxito, con un total de noventa y un asistentes, la mayor parte universitarios, estudiantes de Montes y Forestales, aunque también asistieron guardas, gestores y aficionados.
La presentación del acto corrió a cargo de Paz Arraiza, Subdirectora de Extensión Universitaria de la ESTSI de Montes de Madrid, Álvaro Martínez, Presidente de la Asociación de Caza y Pesca de la Escuela y Juan Herrera por parte de Fedenca.
José Antonio Pérez Garrido, Doctor en Ciencias Veterinarias expuso su ponencia sobre riesgos sanitarios de la perdiz roja, y las posibilidades de supervivencia tras una repoblación. Juan Herrera, Ingeniero Técnico Forestal y Experto en Caza y Pesca, mostró en su intervención los proyectos que ha realizado la fundación Fedenca en temas de perdiz roja y sus conclusiones, así como los nuevos proyectos a desarrollar (Mapa Genético de la Perdiz Roja) o el presentado el día anterior en el Ministerio de Medio Ambiente Rural y Marino, sobre genética de la perdiz roja y sus hibridaciones en el territorio nacional. José Baragaño, profesor emérito de la UPM, señaló las pautas para una gestión adecuada de una finca de perdiz, destacando el dinero y el esfuerzo que supone tener hoy en día un buen coto de perdiz roja sin soltar ejemplares y por último José Miguel Montoya, Ingeniero de Montes y Profesor de la UPM, ofreció una interesante ponencia sobre el cálculo de estructuras biológicas, con muchos conceptos novedosos que ha desarrollado a lo largo de su dilatada experiencia en la gestión cinegética y en la elaboración de proyectos de ordenación cinegética y planes técnicos de caza.
Al final de la mañana se celebró una mesa redonda con la participación de todos los ponentes, que resultó bastante animada, discutiendo varios temas tan importantes como la utilidad de los censos, que no hay que olvidar, son estimaciones y no datos exactos y precisos.
Entre las conclusiones a destacar cabe citar la importancia del proyecto de genética de la perdiz roja, de Fedenca, que pone a disposición de las administraciones autonómicas un instrumento útil y factible para el control genético de las perdices que se sueltan en el campo, al objeto de evitar soltar ejemplares hibridados con perdiz chucar, y como dicen desde el Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino, que apoyará dicho proyecto, cumplir la Ley de Biodiversidad que obliga a conservar la fauna autóctona y evitar la introducción en el medio de especies alóctonas.