Un cazador de 73 años sufre un infarto mientras ayudaba a dispersar jabalíes
Un cazador septuagenario ha tenido que ser auxiliado por los servicios de emergencia tras sufrir un infarto durante una jornada autorizada para la dispersión de jabalíes con perros.
El Seprona de la Guardia Civil se trasladó hasta una zona de Ortigueira, en Pontevedra, para auxiliar a un cazador de 73 años que sufrió un infarto de miocardio. Junto a compañeros de caza, este hombre se encontraba colaborando en una dispersión de jabalíes con perros.
El helicóptero no pudo acceder a la pista forestal
Tras recibir aviso, se activó un helicóptero medicalizado, pero la zona boscosa no permitía la aproximación y el aterrizaje del mismo. Por ello, los agentes del Seprona usaron su propio vehículo para trasladar a los sanitarios hasta el lugar donde esperaba el cazador. Así, pudo ser atendido en la pista forestal para, posteriormente, llevarlo hasta la playa de los Céltigos, donde esperaba el helicóptero para trasladarlo al hospital.