El perro de caza más valiente que verás hoy
Ha hecho presa en una de las orejas del cochino, pero es tan grande que, en cada acometida, el cuerpo y las cuatro patas del perro de caza son lanzados al aire. La temeridad de este can no tiene límites.
El cazador se aproxima a la pelea. Los protagonistas son un perro de caza sin miedo y un jabalí hibridado con cerdo doméstico. La fuerza de la presa consigue que, con cada intento de embestida, consiga hacer volar al perro, que no sale despedido solo porque no suelta la oreja que tiene apresada.
Así explica el cazador lo que rodea al lance que acabamos de ver: “Había algunos cerdos alrededor de un arroyo. Llegó el día, fui a buscarlos. Tenía 3 perros conmigo, 1 suelto para encontrar y 2 atados. Aproximadamente a los 5 minutos, el perro suelto se excitó y 3 segundos después saltó. Levantó a la piara. Cuando los cerdos se rompieron, pude cortar el paso al mejor jabalí”.
Valientes perros para controlar la plaga de cochinos
La manera de cazar es simple. Recorren los bastos terrenos de Australia buscando los cochinos apoyados por el olfato de sus perros. Cuando dan con ellos, los suelen perseguir en sus vehículos todo terreno tipo ATV y quads. Poco después, con los cerdos e híbridos descubiertos, sueltan al resto de los perros, los especialistas en el agarre. Estos disfrutan a partes iguales de una elevada agilidad y velocidad, combinada con un excepcional poder de hacer presa con sus mandíbulas.
No tardan mucho en morder a los suidos y, tras una lucha terriblemente dura, pero protegidos por petos que evitan las colmilladas en sus cuerpos, el cazador acude al remate a cuchillo.
