Un oso carga contra varios fotógrafos que actúan de la mejor manera para salvar la vida
Cuando un oso corre hacia un fotógrafo, este logra que detenga su ataque atemorizándolo con sus gritos.
Siempre han sido las personas quienes han temido el ataque del oso. Por eso, el hecho de que sea el úrsido el que se sienta amenazado por el ser humano hasta el punto de huir, ha llevado a viralizar este vídeo.
Un riesgo de los fotógrafos de fauna
Las imágenes captan el momento en el que un gran oso pardo cruza un charco en dirección a un fotógrafo quien, lejos de amedrentarse empieza a gritarle y a perseguirlo junto con sus acompañantes. Sus amigos se unen a los gritos consiguiendo que el oso se dé por vencido y se vaya.
Los osos, pese a la mala imagen que se ha proyectado de ellos, no suelen atacar a las personas. Aunque son animales salvajes, solo atacan, al igual que el resto de la fauna, cuando se sienten amenazados, cuando tienen mucha hambre y les falta el alimento o para proteger a sus cachorros.
Pocos ataques de osos a personas
En Norteamérica —en donde está grabado este vídeo— se calcula que puede haber alrededor de 50000 osos grizzlies (la subespecie de oso pardo) y solo hay una o dos personas mueren al año por sus ataques. De hecho, ellos temen a los humanos y tratan de mantenerse lo más lejos posible.
Procuran alejarse lo más que pueden de la civilización y buscar, para vivir, zonas de difícil acceso y de densa vegetación.
No hay nada de cierto en los rumores de que los osos atacan a los humanos para alimentarse. Los osos que se sabe que, en realidad consumen a los seres humanos que atacan, son los osos polares. Muchas personas logran sobrevivir a un ataque de otras clases de osos ya que, una vez que el oso siente que ya no está amenazado se irá.
Entre los tipos más agresivos de osos están los osos polares, osos labiados, y los osos negros.
Enfrentarte a un oso
En general, los osos pardos evitan el contacto directo con los humanos y prefieren mantenerse alejados. Sin embargo, en las circunstancias antes mencionadas, como cuando se sienten amenazados o cuando perciben que sus crías están en peligro, pueden volverse más agresivos.
Si te encuentras con un oso pardo, es esencial mantener la calma y seguir algunas pautas básicas de seguridad. Lo más importante es no acercarse. Mantener una distancia de seguridad y respetar su espacio.
Si estás en un área donde hay osos conocidos, haz ruido para alertarlos de tu presencia. Esto les da la oportunidad de evitar el encuentro contigo.
Nunca intentes alimentar a un oso pardo, ya que esto puede generar dependencia hacia los humanos y aumentar el riesgo de encuentros peligrosos en el futuro.
Si te encuentras cara a cara con un oso pardo, no corras ni grites. Retrocede lentamente hacia atrás, evitando el contacto visual directo. Correr podría desencadenar su instinto de perseguirte. Por eso ha sido tan llamativo el vídeo, porque es muy difícil que ante los gritos el oso huya. Lo habitual es que se ponga nervioso y corra hacia las voces.
Si el oso se pone de pie, esto no siempre es una señal de agresión. Los osos pueden ponerse de pie para obtener una mejor vista o para oler el aire. Mantén la calma y espera a que el oso se calme y se aleje.
Con conocimiento, precaución —no hay que olvidar que son animales salvajes y de gran envergadura— y siguiendo las pautas de seguridad adecuadas, es posible coexistir en áreas donde habitan los osos.
