El PSOE escucha a cazadores y pescadores para elaborar su programa electoral

Fernández Vara recibió a los representantes de ambos colectivos dentro del marco de la campaña Contamos Contigo. Sobre la mesa se pusieron las propuestas de interés para ambos sectores. Hemos contactado con José María Gallardo Gil, presidente de la Federación Extremeña de Caza, que asistió a la reunión en representación de los cazadores extremeños.

—¿Quiénes estuvieron en la reunión?

—Por parte de la Federación Extremeña de Caza, nuestro vicepresidente, Manuel Gallardo Casado, y yo, además de dos representantes de la Federación Extremeña de Pesca. Nos recibió Guillermo Fernández Vara, también asistió el responsable de su programa electoral y la portavoz de Agricultura comisión de medio ambiente y rural, María Teresa Macías.

—¿Qué problemas acucian a la caza en Extremadura que deben ser abordados políticamente?

—En la última legislatura, el presidente de la Junta se ha involucrado considerablemente con la caza. De hecho, en los últimos tres años hemos mantenido reuniones de este tipo por temas propios del Ejecutivo. En este caso se trataba de un proceso participativo de cara a diseñar el programa electoral.

Lo que hemos remitido ha sido un dossier de medidas que puedan beneficiar a la región. Hemos tratado de ofrecer nuestra aportación como sector de peso que puede y debe contribuir al desarrollo, intentando que la caza cumpla un papel relevante en el contexto social, cultural, demográfico, laboral.

—¿Cuáles son las medidas que se han propuesto al Gobierno de la Junta?

—Entre otras cosas, medidas para favorecer el acceso de la mujer al sector cinegético, un plan de recuperación de la caza menor, una propuesta para que la futura Política Agraria Común contemple medidas agroambientales que puedan beneficiar a toda la recuperación de la fauna y de la caza menor en particular, que la caza forme parte de ese proceso participativo de creación de la nueva PAC. Algo que consideramos muy importante, el impulso del relevo generacional en la caza, factor imprescindible para evitar el despoblamiento rural y para generar empleo, así como el impulso de la actividad cinegética como una actividad profesional.

Otras de las propuestas que hemos realizado son la formación del sector, la divulgación de la naturaleza en colectivos propios y ajenos al sector, el desarrollo de figuras que recogen las leyes nacionales, autonómicas o europeas, como el cazador formado, como los cotos sociales preferentes, o la caza natural de Extremadura. También que se incluya la caza en la Estrategia Verde Circular que se denomina Extremadura 2030, que se impulse a las empresas, el turismo, el desarrollo rural, firmas artesanales, de producción, cárnicas, productos gourmet… en torno al sector

Hemos pedido muchas cosas, como que la caza participe, al igual que lo hacen grupos ecologistas, en los órganos y consejos de representación autonómicos. Me resulta increíble que aún no hayamos entrado en el Consejo Sectorial de Medio Ambiente, o en el Consejo Rector del Parque nacional de Monfragüe. No tiene sentido, y hemos hecho hincapié en esto.

Nuestras peticiones han ido encaminadas a lo que el sector precisa, pero también a cubrir unas necesidades que afectan a toda la región, como evitar el despoblamiento rural que está alejando al extremeño del campo, porque se ve casi obligado a abandonar la caza, el cuidado del campo, y eso es negativo para Extremadura.

—¿Qué actitud notó por parte del presidente de la Junta? ¿Cuáles de estas medidas cree que van a ser consideradas?

—Ya estuvimos reunidos con ellos en febrero y la actitud es positiva. Nos han dado la enhorabuena por la imagen que está construyendo nuestra asociación juvenil JOCAEX. También les hemos remitido las medidas por escrito, con textos de justificación de cada una de ellas, e instándoles a que nos llamen para debatir lo que sea necesario.

Nosotros esperamos que se recoja la mayoría de ellas, sobre todo las más prioritarias.

—Yolanda García Seco tomó posesión ayer como delegada del Gobierno en Extremadura, anunciando que en su nuevo cargo se ha marcado como objetivos trabajar contra la despoblación de los pueblos. ¿Es la caza una de las patas sobre la que debe apoyarse este proyecto?

—Sin ninguna duda. Nosotros lo venimos demandando desde hace mucho tiempo, pero este tema merece una política de impulso empresarial. No es suficiente con mostrarse interesado en el tema. Hay que ser realista, hacer uso de todos los medios que tenemos a nuestro alcance, y uno de los más importantes, como actividad que ayuda a las familias a conseguir una renta extraordinaria, sin duda alguna es la caza y la gestión de los cotos de caza.

Cuando termina la temporada no debe acabar la actividad en torno al sector. En los cotos de caza se pueden plantear actividades como la observación de aves, la observación de estrellas… A los cotos se les puede incluir en planes de actividades turísticas extraordinarias para el beneficio de una región en la que la ganadería y la agricultura están perdiendo fuerza en la economía. Te puedo poner el ejemplo de la Siberia Extremeña, una zona rica en pantanos, reservas y cotos de caza. La mitad del año, los hoteles están repletos de cazadores, mientras que la otra mitad, son los pescadores lo que los llenan.

Nosotros lo estamos demandando desde hace tiempo, pero es la Administración la que debe tenernos en cuenta en sus planes, impulsar acciones, una oferta atractiva para que el cazador acuda con su familia, y atraer a gente de fuera del sector a otras actividades de ocio, turismo y culturales en las que nosotros podemos colaborar.

—¿Tiene previstas otras reuniones con otras fuerzas políticas?

—Siempre que nos llamen, acudiremos a aportar lo que podamos. En las anteriores elecciones estuvimos muy en contacto con el PP porque quiso hacernos partícipes de su programa electoral, incluyendo las propuestas que les hicimos llegar.

Y esperemos que otros grupos parlamentarios, como Ciudadanos y Podemos, con los que hemos tenido contactos en esta legislatura, nos llamen para que podamos trasladarles nuestra opinión y propuestas en beneficio de la caza y de la región.