Un nuevo estudio científico revela la verdad sobre la mortandad de aves por plomo: nos han mentido y es cinco veces menor que lo que nos aseguraron

La conclusión de un estudio científico independiente es demoledora: “Las estimaciones actuales de las pérdidas de aves terrestres en toda Europa por la ingestión de munición de plomo se basan en suposiciones inciertas o genéricas”.

La chapuza europea para intentar prohibir las municiones de plomo

El trabajo publicado y difundido por la ECHA es tachado por los investigadores de Arcadis US como incierto. Detallan que las estimaciones intermedias de reducción del tamaño de la población son inferiores a las sostenidas; disminuciones que también dependen de la historia de vida de la especie, la tasa máxima de crecimiento, la tendencia poblacional y la hipótesis de reproducción reducida.

El nuevo estudio ha utilizado un método de 2 fases, utilizando datos de canales y modelos de población y que estima el porcentaje de muertes diagnosticadas como causadas directamente por envenenamiento por plomo como un límite inferior y, como un límite superior, el porcentaje de posibles muertes por envenenamiento por plomo subletal que debilita a las aves, haciéndolas susceptibles a morir por otras causas.

Un método más exacto y realista

En la investigación se ha considerado la proporción de muertes directas e indirectas por envenenamiento por plomo, no las que se sospechaban resultantes de envenenamiento, descartando causas inmediatas obvias de las muertes de las aves, como depredación, atropello, colisión con líneas eléctricas. Además, se han realizado necropsias para asegurarlo y un análisis toxicológico en aquellos casos en los que había que aclarar las causas de la muerte del animal.

Los resultados obtenidos han reducido enormemente las cifras que la ECHA atribuía a la ingestión de plomo para señalar la muerte de aves en Europa, además de demostrar que el trabajo anterior conduce así a resultados incorrectos. Un trabajo en el que se han basado políticos europeos, azuzados por grupos ecologistas deseosos por limitar y prohibir la caza de aves.

Principales errores del estudio europeo frente a la nueva investigación

-Los investigadores han evaluado el porcentaje de cadáveres muertos debido a la ingestión de municiones de plomo (autopsia real e informes patológicos o datos de seguimiento de campo disponibles con transmisores), y luego convertir ese porcentaje en tasas de mortalidad anual.

-Se ha usado un modelo completo que incorpora la dinámica de la población para evaluar los cambios en la tasa de crecimiento y el tamaño de la población en función del número y el estado de las canales.

Resultados mucho menores a los difundidos por la ECHA

Aun así, tras utilizar métodos con mayor amplitud y que consideran más escenarios de posibles incidencias del plomo en las aves que lo ingieren, los científicos han concluido que la causa directa de muerte es cinco veces menor que la apuntada, según Arcadis US, de manera arbitraria la ECHA. Un 0,2% frente al 1%. Una diferencia que, analizada en términos totales, resulta abismal.

Los estudios de la ECHA deberían desecharse

Con esta investigación y sus resultados, se demuestra que los trabajos anteriores utilizaron una metodología poco eficaz y que conduce a resultados incorrectos que no deben tenerse en cuenta.

Consulta el estudio al completo pulsando en este enlace.

Algo que ya realizó la Federación Sectorial Española de Armas y Municiones en un completo informe a la consulta “Plomo y sus Compuestos”, en el que analizaba punto por punto el texto con pretensiones prohibicionistas de la ECHA para rebatirlo con investigaciones científicas anteriores.

La ciencia desmonta a los que pretenden prohibir el uso del plomo en la munición de caza