Piden solo dos años y medio de prisión para la dueña de una protectora por matar 500 perros

El juicio por presunto maltrato de la dueña de un refugio de perros en Camarles (Tarragona) ha dado inicio en el juzgado de lo Penal de Tortosa. La acusada enfrenta cargos de maltrato animal continuado relacionados con la muerte de cientos de perros en el refugio.

De qué se le acusa

Maltrato animal, eutanasias injustificadas, falsificación de documentos, intrusismo laboral y prácticas ilegales con fines lucrativos. Esas son las razones por las que en 2020 la Guardia Civil de Tarragona detuvo a la directora y responsable del Albergue Amigos de los Animales de las Terres de l’Ebre. La acusada llevaba diez años actuando con total impunidad tal y como informamos desde Club de Caza. Puedes leer la noticia haciendo clic en este enlace.

Rechazada la suspensión

En la primera sesión, diversos testigos han confirmado prácticas cuestionables en el refugio. La defensa de la imputada, sin embargo, había solicitado la suspensión del juicio argumentando la existencia de un recurso pendiente en la Audiencia de Tarragona alegando que no habían tenido acceso completo a la documentación incautada por la Guardia Civil en 2020. Según la defensa, solo pudieron revisar la documentación en el cuartel de la Guardia Civil de la Rápita en tres o cuatro ocasiones y, además, se les prohibió tomar fotografías. La jueza rechazó la suspensión y la defensa ha presentado un recurso por “vulneración del derecho de defensa” en la Audiencia de Tarragona.

Pese a eso, la jueza argumentó que existían indicios suficientes para iniciar el juicio y la sesión continuará con la presentación de pruebas por ambas partes.

Tiene otro refugio en la actualidad

La Fiscalía y los abogados de la acusación particular critican la estrategia de la acusada de prolongar el procedimiento indefinidamente, especialmente contemplando el hecho de que tiene otro refugio de animales en la actualidad que es, en este momento, su medio de vida.

¿Y si hubieran sido 500 perros de caza?

El animalismo y los medios de comunicación afines a él rápidamente utilizan casos de maltrato animal para criminalizar al colectivo cazador. El hecho de que dentro del sector haya personas que cometan atrocidades, no debería servir para estigmatizar al resto, pero se hace.

Un cazador ni maltrata ni mata a sus perros. Aunque porte un arma y salga al campo, un ser que es capaz de hacer eso no es un cazador, es un delincuente. Los cazadores de verdad repudian y denuncian esos comportamientos.

No sólo delinquen personas que se hacen llamar cazadores, también lo hacen otras que se autoproclaman animalistas y ecologistas. El de la directora de Albergue Amigos de los Animales de las Terres de l’Ebre es sólo un ejemplo de tantos.

Cabe destacar el reciente caso de una protectora canaria que además de utilizar la exportación de perros para lucrarse, tenía a los animales en condiciones higienico-sanitarias deplorables. Además, la Guardia Civil encontró cadáveres semienterrados en un terreno anexo al refugio. Puedes leer todos los detalles pinchando aquí.

Otro caso para recordar es el de una protectora almeriense en la que se encontraron 66 perros en lamentables condiciones físicas y otros ya muertos.

Podríamos sacar a la palestra multitud de casos de maltrato animal perpetrados por protectoras y entidades animalistas, pero no es el fin. Si lo es, sin embargo, denunciar la estigmatización y criminalización a la que el animalismo somete a los cazadores por hechos que ellos mismos tienen dentro de su colectivo.