Tranquilo paseo nocturno de dos jabalíes por un populoso barrio de Gijón

Dos ejemplares de jabalí fueron vistos y grabados en la madrugada de hoy paseando tranquilamente por varias calles del emblemático barrio de Gijón, La Calzada. El hecho de que fuesen aproximadamente las 3 de la madrugada lo que conlleva que todo estuviese vacío, propició que los animales diesen un largo paseo, recorriendo todas las calles sin ningún ánimo de abandonar la zona que encontraron muy segura lejos del ser humano.

No es la primera vez

Ya son varias las ocasiones en las que se han avistado jabalíes en la ciudad asturiana de Gijón, como en tantas otras dada la superpoblación de estos suidos.

Incluso, el pasado mes de noviembre se ha podido ver a uno de ellos dándose un baño en la Playa de Poniente.

Hasta ahora habían entrado por el sur y el este de la ciudad, ya que la zona oeste estaba protegida por la autopista denominada Y. El problema es que ya ni eso les ha detenido y han acabado atravesándola lo que se refleja en el hecho de que apareciese en la ya mencionada playa de Poniente.

En Club de Caza ya nos hicimos eco de esta problemática en Asturias, como podéis ver en el siguiente enlace.

Peligro potencial y real

Aunque puede resultar muy curioso y llamativo para algunos, la reacción más natural de los viandantes o bañistas en el caso de las playas, es gritar y asustarse lo que puede hacer que el animal entre en pánico por sentirse amenazado y desencadene un ataque.

La mejor reacción

Lo más normal es que solo se trate de un breve contacto visual o un avistamiento lejano porque no es frecuente que nos acerquemos a un animal salvaje, salvo que se nos cruce. Por lo general, son tímidos, y, ya sea por su capacidad auditiva, olfativa o visual, acostumbran a percibir nuestra presencia mucho antes de que nosotros podamos notar la suya.

Ya que cada vez es más frecuente que animales como jabalíes, zorros, ciervos e incluso lobos, pueden llegar a los pueblos y ciudades, e incluso moverse por ellas, no está de más que recordemos que hay que evitar correr o gritar. Es importante no hacer ningún movimiento brusco e intentar retroceder o apartarse muy despacio.

Nunca sostengas un palo en el aire ni hagas otros gestos amenazadores ya que, como hemos dicho, cuando un jabalí u otro animal salvaje se siente amenazado, puede volverse peligroso.