Los cazadores catalanes están hartos y plantean hacer una huelga indefinida
Los derechos de los cazadores catalanes están siendo vulnerados, su actividad cada vez se encuentra con más trabas y la situación es crítica. El colectivo exige a la Consejería de Acción Climática un mayor respeto.
La caza en España no atraviesa su mejor momento, más bien todo lo contrario. El desprestigio social, el acoso y la presión que ejerce el lobby animalista y un gobierno que cada vez deja más desamparado al mundo rural, hacen que su futuro esté pendiendo de un hilo. Un hilo que, en Cataluña, está a punto de romperse.
El sentir general de los cazadores en esta comunidad es de humillación, abandono y decepción. Hoy hablamos con Sergi Rodríguez, el coordinador de la Plataforma Gossers de Catalunya, una plataforma de reciente creación formado por un colectivo de rehaleros catalanes
¿Qué está pasando en Cataluña?
El gran problema que tenemos con la caza en Cataluña es que cada año se sacan nuevas normativas que tratan de dificultar la práctica de la actividad. El problema ya viene de 2020, cuando estábamos todos encerrados en casa, que comenzaron a imponer sanciones abusivas. Un claro ejemplo de esas penalizaciones es que si un cazador en medio de una batida cruza un camino con el arma colgada cargada para cortar un perro que se va a salir de la zona que se está batiendo, te meten una multa de 3.000€ y 2 años sin cazar, mucho más que a alguien que conduce borracho poniendo en peligro la vida de otras personas.
Los cazadores, localizados
Una de esas normativas que dificultan el ejercicio normal de la cinegética fue la que se impuso el año pasado del “8.3”, según la cual los cazadores debían dar su ubicación exacta -coordenadas incluidas- durante las batidas en Parques y Reservas. Una norma con poco sentido ya que, como sabemos quiénes cazamos, que los animales hoy se encuentren en un punto concreto, no significa que vayan a estarlo mañana.
Con el 8.3, si se cortan jabalíes en el punto “x” (donde se ha enviado la ubicación) y resulta que ahora se encuentran en el punto “y”, no podríamos ir a echarlos, pese a estar dentro del área que se está cazando. No tiene sentido alguno.
Los perros, la trampa
Otras de las normativas a las que los cazadores no encuentran sentido y que consideran, les atacan directamente son las relativas a la tenencia de sus perros.
El tema de las perreras es inasumible: te obligan a sacarlos 1 hora todos los días, media por la mañana y media por la tarde, pero no se dan cuenta que la gente trabaja y que por motivos laborales eso en muchos casos no puede cumplirse.
Además, contaba Rodríguez, está el tema de la limpieza. Está claro que hay que tener a los perros en perfectas condiciones higiénico-sanitarias, pero de ahí a que si el perro defeca y tú no estás en ese momento para recogerlo te multen…
Si vas una vez al día a atender a los perros, los alimentas, les das agua, los limpias y cuando te vas, defecan y en ese momento pasa el Seprona podrías llevarte una importante sanción económica. Es decir, una persona que tiene a sus perros en perfectas condiciones será sancionado única y exclusivamente porque no estaba en el momento justo en que el perro hizo su deposición. Se trata de una norma tan injusta como surrealista, que carece de sentido común.
La forma de condenar a quien tiene a los perros en malas condiciones sería analizar la situación durante un periodo de tiempo x, tal vez, una o varias semanas: si en ese tiempo las condiciones son deplorables el individuo tiene que ser sancionado, pero no la persona que cada día atiende correctamente a sus perros.
Perreras
El consejero d’Acció Climática del Govern de la Generalitat, David Mascort, quien quería incluir a los perros de caza en la Ley de Bienestar Animal, no sólo ha dejado patente su postura claramente anti-caza, sino que además se comprometió a repartir más subvenciones a colectivos animalistas.
Por otro lado, la directora de Ecosistemas Forestales y Gestión del Medio, Anna Sanitjas, afirmó que podíamos tener 2 perreras en el mismo terreno, sin embargo, cuando los cazadores le preguntamos si esto aparecía escrito en la normativa, la respuesta fue que no. Pretenden que acatemos una norma que ni ellos mismos han puesto por escrito. Algo inaudito”.
Núcleos zoológicos de los cazadores
Algo parecido pasa con los llamados “núcleos zoológicos”. Supuestamente la cría de cachorros únicamente puede llevarse a cabo si estás inscrito como núcleo zoológico, salvo que esta sea para uno mismo. Eso, en teoría, porque la ley tampoco especifica nada. Vamos, si yo he tenido una camada porque recientemente se me han muerto un par de perros y viene el Seprona o los Mossos, me van a multar. Te dicen que puedes, pero no lo ponen en ningún lado. A efectos legales, es como si incurrieras en un delito. Buscan la manera de perjudicar al cazador.
Otro aspecto que clama al cielo es que la tenencia de perros de caza se ha limitado a 14 ejemplares. Entonces si por ejemplo tengo los 14 que se permiten, pero 6 son cachorros que aún no cazan y otros 5 son mayores y los tengo ya jubilados, ¿Salgo a cazar con solo tres perros?
No tiene ningún sentido, como tampoco lo tiene que si un cazador venía teniendo 25 perros tenga que deshacerse de 11 de ellos. Los cazadores queremos a nuestros perros, no sólo son nuestros compañeros de trabajo como hay quien piensa. Los queremos.
Sobre esto también se han pedido explicaciones. La respuesta de los consejeros es que para mantener todos los perros se debe “conseguir que se te reconozca como núcleo zoológico”, sin embargo, no te acreditan ni aunque tengas las perreras “para comer en ellas” como las tienen gente que yo conozco por lo que también te sancionan, si no te deshaces de tus perros.
¿Dónde nace la decisión de movilizarse?
El malestar general de los cazadores catalanes se ha materializado en la reciente creación de la Plataforma de Gossers de Catalunya. Esta entidad ha surgido para dar voz la situación crítica de los cazadores y perreros catalanes. Las normativas que acabamos de ver, relativas a sus perros, han sido la gota que colmó un vaso que desde hace años amenazaba con rebosar.
“Nunca nos hemos sentido tan poco respaldados por la Federación Catalana de Caza”- se lamentaba Rodríguez.
Por otro lado, contaba Rodríguez que el 20% del PIB catalán proviene del cerdo, un porcentaje muy importante que se ve amenazado por la Peste Porcina Africana. En Francia hay animales enfermos que, de cruzar nuestra frontera, podrían contagiar a los ejemplares autóctonos, lo que supondría un problema muy grave. Cazar jabalí reduce considerablemente ese riesgo y bien lo sabe la Generalitat que nos pide que cacemos incluso a temperaturas inhumanas. Tratan de comprarnos dándonos chalecos para nuestros perros, pero luego no nos ponen más que trabas como las que acabamos de comentar.
En esta contradictoria situación se encuentran los cazadores en Cataluña y por ella están dispuestos a luchar.
Entonces, ¿qué exigen y a quién?
Piden a la Consejería d’Acció Climática que dejen de importunar a los cazadores con requisitos inalcanzables y normas carentes de sentido; que se deje de humillar al colectivo y de cohartar la libertad de sus miembros, permitiendo el desarrollo normal de la actividad cinegética y el ejercicio de su derecho a cazar.
Se han enviado encuestas telemáticas a los distintos grupos de cazadores de Cataluña y más del 90% están de acuerdo con llevar a cabo una huelga indefinida. Mañana tendremos una reunión para ver si el parón sale adelante, pero todo apunta a que sí.