I Asamblea y constitución del Club de Becaderos de Madrid
El pasado 24 de febrero se dio el pistoletazo de salida al ilusionante proyecto del Club de Becaderos de Madrid a través de su primera asamblea general.
Finalizada la temporada de caza, con los estertores del invierno, y cuando las becadas comienzan a replegarse a sus cuarteles de invierno, ese instante en que un especie de vacío infinito se presenta ante los amantes de la caza, un grupo de apasionados becaderos del centro de la península ha dado luz a un nuevo Club de Becaderos, el Club de Becaderos de Madrid (CBM).
Un club que no pretende rivalizar con ningún otro club, ser alternativa, ni nada similar, un club humilde que nace sin grandes pretensiones, ninguna más allá de aunar esfuerzos por una caza sostenible de la becada en Madrid, de difundir unos valores y una cultura becadera con todo lo que engloba: desde el estudio hasta la cinofilia, de ser un nexo de unión de un grupo de gente con un interés común y unos valores similares, dónde todos somos iguales siempre y cuando se respete la legislación vigente, proponiendo en cualquier caso a las administraciones competentes las modificaciones pertinentes en aras de la conservación.
El Club de Becaderos de Madrid está abierto a colaborar con clubes de condiciones similares, con asociaciones y con federaciones, tanto a nivel territorial como nacional, siempre en beneficio de la caza de la becada.
«Los pilares del CBM se basan en un estudio, respeto, dedicación y caza sostenible de un ave aún no suficientemente reconocida en Madrid, y siempre con un trasfondo ético en la caza como no puede ser de otra manera cazando la becada con perro de muestra, no a la espera ni otras modalidades similares que atentan contra toda lógica cinegética», concluyen.