Un águila real se descuelga desde el cielo para dar caza a una perdiz
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Un águila real se descuelga desde el cielo para dar caza a una perdiz

Poco o nada tienen que hacer los animales que un águila real pone como objetivo. Como se aprecia en este vídeo, esta ave rapaz es una de las especies cazadoras por excelencia en la naturaleza.


No muchos seres pueden igualar la grandiosidad y la habilidad del águila real. Esta rapaz, también conocida como “águila dorada” por el característico plumaje dorado de su nuca, es una cazadora experta en la naturaleza. Dotada con una excepcional combinación de fuerza, velocidad y visión aguda, esta águila se posiciona como un depredador supremo en los hábitats montañosos y de estepa que abarcan Europa, Asia, África del Norte y América del Norte.

De hábitat y distribución global

El águila real es reconocida por su capacidad de adaptación, que le permiten habitar diversos entornos, desde altas montañas hasta vastos desiertos. Su distribución geográfica abarca un amplio espectro de territorios, que van desde las regiones áridas del suroeste de Estados Unidos y México, pasando por las tierras altas de Escocia, hasta las extensas estepas de Asia Central y las imponentes cordilleras del Himalaya. Esta adaptabilidad le permite enfrentar una amplia gama de condiciones climáticas y geográficas, consolidándola como una de las aves rapaces más extendidas en todo el mundo.

Nacida para cazar

Sus características físicas y funcionales están perfectamente diseñadas para la caza al vuelo. Sus alas anchas y poderosas le permiten planear sin esfuerzo durante largos períodos de tiempo y su agudo sentido de la vista le brinda una visión excepcional para detectar presas desde grandes alturas y varios kilómetros. Además, es capaz de localizar prácticamente cualquier movimiento en el suelo por sutil que sea.

La destreza del águila real en la caza es sencillamente impresionante. Una vez ha localizado a su presa, se precipita hacia abajo a una velocidad vertiginosa, alcanzando hasta los 240 kilómetros por hora en el descenso. Sus garras afiladas, que pueden llegar hasta los 7 centímetros de longitud, son armas letales que emplea con extremada precisión. También hay que destacar su fuerza ya que el águila captura desde presas de pequeño tamaño como ratones y conejos hasta gatos y zorros.

Puedes ver el momento en que un águila caza un gato doméstico haciendo clic en este enlace.

Siguiendo con su dieta

El águila real es un depredador oportunista que adapta su dieta a la disponibilidad de presas según su ubicación geográfica. Además de roedores, conejos, liebres y zorros, este depredador también da caza a otras aves como es el caso del vídeo que os dejamos a continuación. Tampoco es extraño verla capturar reptiles y aunque, en situaciones muy concretas, también insectos como el saltamontes.

El principal problema que representa el águila real para otras especies animales es que ataca a las crías y su voracidad en ocasiones termina con nidos enteros repercutiendo negativamente en el futuro de algunos de ellos.

También crías de oveja y cabra están en su lista de animales susceptibles de ser cazados. Concretamente, las crías de cabra montés son una de sus presas favoritas. Pese a habitar terrenos muy escarpados y de difícil acceso, su agilidad para cazar al vuelo le permite capturarlos sin mayor problema.

El vídeo

Publicado en YouTube por la organización WWF España, estas imágenes permiten vivir de cerca el momento en que una de estas águilas captura a una de sus presas. Se trata de una especie cinegética, una perdiz, que no ha tenido siquiera opción a esquivar la rápida acción del águila dorada.

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