Los pelos de punta: esto es lo que siente un cazador cuando encuentra a su perro perdido
El cazador no puede contener la emoción y rompe a llorar cuando uno de los compañeros que le estaba ayudando en su búsqueda le entrega al perro perdido tres días atrás. Imposible no conmoverse con las imágenes del reencuentro con su setter inglés.
Cuco López y su perro Conan, un macho de dos años y medio, son los protagonistas de esta historia con final feliz, aunque entre lágrimas. El cazador canario de 54 años, natural de Las Palmas de Gran Canaria, lleva cazando desde que pudo dar sus primeros pasos. A lo largo de su vida ha tenido perros de muestra de diferentes razas. Actualmente caza con podencos andaluces, setters inglés y bracos alemanes.
Compañeros y familiares del cazador colaboraron en la búsqueda del perro
El domingo, Cuco fue de caza junto a tres amigos a la isla de Tenerife. A las 11 horas, dos de los cazadores derribaron dos perdices morunas. Los pájaros cayeron en un barranco. Cuando los cazadores bajaron para recuperar las perdices, uno de los perros de Cuco quedó de muestra. En ese momento, perdió de vista a Conan. Desde ese instante, los cazadores comenzaron a buscarlo. Todos ellos dieron por finalizada la cacería para participar en la búsqueda.
Estuvieron buscando al perro hasta las 20 horas, momento de la salida del barco de vuelta a Las Palmas. Los compañeros de Cuco, residentes en Tenerife, continuaron la búsqueda hasta las 00:00 horas. Laura, hermana del cazador, al enterarse de lo sucedido, publicaba la foto del perro en redes sociales.
El cazador junto al setter inglés y una de las perdices autóctonas de las Islas Canarias. A la derecha, el setter inglés protagonista de esta emocionante historia.
Continúa la búsqueda
La mañana siguiente una amiga de la hermana del cazador le informa que el perro ha sido visto por las calles de San José de la Vera. El lunes, Rino y Vicente, amigos del cazador que viven en Tenerife, continúan buscando al perro. Este día el cazador no se puede desplazar a la isla por motivos laborales.
El cazador y su mujer duermen en su coche por si regresa el perro al último sitio donde había sido visto
El martes, el cazador junto a Maika, su esposa, viajan en barco hasta la Isla de Gran Canaria. Allí los espera Rino para ir a buscar al setter al sitio donde fue visto por un vecino por última vez. Hasta las 00:00 horas estuvieron buscando al perro. El cazador y su esposa se quedaron durmiendo en el coche por si aparecía el setter en la ubicación señalada por la persona que lo vio.
Nada más amanecer, continuaron buscándolo. Cuando se disponían a imprimir carteles con la imagen del perro, Rino les llamó diciéndoles que habían visto al can en una carretera secundaria. Mientras que Cuco lo buscaba a pie, Rino lo hacía en su vehículo. Treinta minutos más tarde, a las 13:00 horas, aparecía el tinerfeño con el perro.
Las imágenes se convierten en un fiel reflejo del amor que los cazadores sienten por sus perros, compañeros de caza, pero también parte de la familia, como nos contaba emocionado el cazador, ya más tranquilo tras tener junto a él a Conan, del que apenas se separa.
CdC
