Una podenquera de cuatro años libera los conejos capturados con vida por sus perros
La joven cazadora, al finalizar la temporada de caza, devuelve a su medio los conejos que ha recuperado con vida. Los suelta en los lugares en los que ha disminuido el número de lagomorfos para intentar recuperar sus poblaciones.
Esta es la verdad de la caza. El padre de la cazadora le ha transmitido su amor por los perros y la naturaleza. A pesar de su corta edad, Irene ya sabe que cazar no es simplemente capturar animales. De ahí que cuide de los conejos capturados con vida por sus podencos para, posteriormente, liberarlos al terminar la temporada de caza.
Irene junto a uno de los podencos de la familia.
Captura y suelta de conejos
Irene, es hija de José, apodado "el Sierra". El cazador cría podencos canarios e ibicencos. Su amor es tal por los perros de estas razas que ha creado dos páginas en Facebook para difundir las razas, Podencos Canarios de la Sierra, y Podencos Ibicencos Del Sierra. La murciana acompaña a su padre de caza desde que dio sus primeros pasos. Sueña cada jornada con que su perro preferido de nombre Clape, un ibicenco macho de 6 años, capture un conejo.
La pequeña demuestra un amor incondicional por sus perros de caza. Lleva casi toda su vida junto a los perros y viviendo con pasión la caza.
Todas las piezas que son atrapadas con vida son cuidadas por la murciana y José hasta que se da por finalizada la temporada de caza del conejo en Murcia. Ambos son conscientes de que hay ayudar a la recuperación de la especie en los lugares en los que la mixomatosis y la NHV han diezmando su número.
La traslocación del conejo de monte
Se trata de una herramienta básica en la gestión de los terrenos cinegéticos. Consiste en trasladar los ejemplares de un lugar en el que abundan u ocasionan daños a la agricultura a zonas despobladas. Se han realizado diferentes estudios para evaluar los efectos de las traslocaciones en las poblaciones de conejos.
El CSIC publicó un artículo en el año 2019 describiendo los fracasos que se habían cosechado en el Parque Nacional de Doñana tras la suelta de miles de ejemplares. Según este estudio, el mayor número de bajas en los animales traslocados es consecuencia del estrés que se genera en los lagomorfos durante su manejo. Factores que aumentan la supervivencia de los conejos son la creación de un vallado perimetral en la zona de suelta y procurar alimentación suplementaria en las cercanías de los vivares.
Javier Fernández
