Coincidiendo con el Día Mundial del Tigre, WWF denunció la caza furtiva porque es la mayor amenaza para los tigres salvajes y lamentó que un total de 1.590 ejemplares fueran capturados entre enero y abril de 2014, según estadísticas de Traffic.
Esta cifra representa un promedio de dos mamíferos capturados por semana, aunque es probable, según WWF, que los niveles actuales de caza furtiva sean más elevados.
Por este motivo, la organización teme que en algunos países estén desapareciendo las poblaciones de tigre en manos de la caza furtiva
«sin que nadie lo note» al no llevarse a cabo seguimientos regulares de sus poblaciones, como es el caso de países como Malasia, Indonesia, Tailandia, Myanmar, Laos, Camboya y Vietnam.
En la actualidad, solo India, Nepal y Rusia realizan censos nacionales regulares y pronto lo harán también Bután, Bangladesh y China, cuyos estudios están en proceso.
WWF pidió a todos los países que realicen sus censos de manera urgente ya que, debido a que los estudios se demoran entre seis meses y un año, deberían comenzar ya para tener un censo global actualizado del tigre a mitad de camino para el objetivo Tx2 en 2016, una iniciativa de 2010 que pretende duplicar las poblaciones de tigre para el año 2022.
En este sentido, el líder de la Iniciativa del Tigre de WWF, Michael Baltzer, dijo que estamos a más de un tercio del camino hacia el 2022. Necesitamos movernos más rápido, con más determinación si queremos lograr el objetivo.