Proyectiles de cobre vs plomo

De un tiempo a esta parte se está discutiendo sobre la eficacia de municiones alternativas a las tradicionales que no contengan plomo. En la cartuchería no metálica no existe alternativa balísticamente razonable a los cartuchos convencionales, por lo menos no a un precio que la haga disponible para los mortales, pero en la cartuchería metálica cabe plantearse si los avances tecnológicos y de diseño, han conseguido productos de eficacia similar a las convencionales de plomo o, cuanto menos, ‘competitivas’.


  Proyectiles de cobre vs plomo
Proyectiles de cobre vs plomo
 

En este artículo vamos a evaluar si los proyectiles de cobre, la actual alternativa a los proyectiles tradicionales de la cartuchería metálica, ofrecen similares prestaciones y cuáles son sus características. Para ello analizaremos sus principales aspectos y en qué modo su balística se ve afectada, completando este pequeño estudio con algunas pruebas de campo. Estas últimas han sido realizadas con una de las más importantes y conocidas municiones de rifle alternativas que podemos encontrar hoy en día en nuestro mercado.

Realmente no se trata de un campo nuevo para los fabricantes de munición, porque los primeros proyectiles de cobre datan de la década de los 80s, disponibles entonces en una pequeña variedad de calibres. Pero sí es cierto que ha sido en los últimos años, a principio de la primera década del 2000, cuando se han empezado a conocer con cierta relevancia por la comunidad de cazadores. La brecha la iniciaron algunos fabricantes de EEUU, ante las amenazas prohibicionistas del estado de California. Aunque hay que decir también, que paralelamente en Europa, otros fabricantes conscientes de esta situación, iniciaron también sus programas de I+D+i con este tipo de proyectiles.

Finalmente señalar en esta introducción que, a día de hoy, y aunque la munición sin plomo en muchos calibres está disponible en las armerías, la munición alternativa solo constituye una pequeña parte de la fabricación anual de las empresas de municiones. De acuerdo a datos de la industria norteamericana, de todas las municiones producidas anualmente, solo el 5,3% de las municiones de fuego central y el 0,5% de municiones de fuego anular se producen con metales alternativos, aunque para los proyectiles esta cifra asciende al 24%. Además, debemos pensar que no toda esta producción está destinada a la actividad cinegética, sino que hay parte de esa producción referida a munición por ejemplo de entrenamiento para el ámbito policial y otras.

Aspectos balísticos

Como hemos comentado en la introducción pasamos a analizar diferentes aspectos técnicos y balísticos del proyectil, que se ven afectados al sustituir el plomo por cobre. Como veremos el nivel de incidencia será variable, algunos serán positivos y otros no tanto, pero en definitiva y como ya sabemos por su presencia en el mercado, representan una alternativa para casi todas las modalidades de caza. Quiero señalar que las características que se analizan a continuación se corresponden con un proyectil genérico, naturalmente cada fabricante aporta su ingeniería y experiencia propia. Esto hace que se den comportamientos ligeramente diferentes entre una marca y otra, debido a que el tipo de aleación y el diseño, tienen más peso de lo que pudiera parecer a priori.

Penetración

Cuando hablamos de penetración de un proyectil, indefectiblemente tenemos que referirnos a la densidad seccional (DS) del mismo. Este es un ratio o cociente entre el peso del proyectil y diámetro del mismo medido en unidades de superficie. El resultado obtenido es un número, que nos indica lo pesada que es la bala con respecto a su diámetro. Es por tanto obvio que balas de igual peso para un mismo calibre, tendrán el mismo valor en cuanto a DS, independientemente de su forma. Este valor es importante por el efecto que tiene en cuanto a la penetración en el objetivo, a igualdad de diseño del proyectil, capacidades expansivas, velocidad, etc., cuanto mayor sea el DS mayor será su capacidad de penetración. En lenguaje más coloquial, entre dos balas de igual peso, penetrará más aquella que sea más estrecha o delgada, debido a que concentra la misma fuerza en un área más pequeña sobre el objetivo.

Supongo que algún lector se estará preguntando ya por qué esto es importante. La respuesta es sencilla, si el proyectil no es capaz de atravesar el pelo, la piel, masa muscular o incluso huesos para llegar a órganos vitales, difícilmente seremos capaces de abatir la pieza. Obviamente la densidad seccional debe ir en consonancia con las características morfológicas del animal a abatir, poco tiene que ver un corzo con un alce, por las características de por ejemplo la densidad de sus tejidos o la profundidad de sus órganos vitales. Algo que muchos cazadores hacen intuitivamente cuando seleccionan el peso de punta para su cartucho. En Estados Unidos existen tablas clasificatorias de su fauna de caza, que ponen en relación rangos de densidades seccionales con grupos de animales.

Con lo explicado anteriormente, cabe preguntarse qué ocurre con los proyectiles de cobre y otras aleaciones. Porque está claro que existen importantes diferencias entre un metal y otro, lo más obvio es que el plomo es más pesado que el cobre. Técnicamente hablaríamos mejor de peso específico de estos metales, que es otro cociente, que expresa la relación entre peso del metal y el volumen que ocupa. El peso específico del cobre es de 8,90 Kg/dm3 y el del plomo de 11,37 Kg/dm3. A tenor de esto, podemos deducir rápidamente que a igualdad de peso y calibre, una punta de cobre ocupará más espacio físico que una de plomo, es decir, será más larga ya que el calibre es el mismo.

Por otra parte, hay otro aspecto físico del cobre que tiene gran importancia, cuando hablamos de un proyectil que va a penetrar en el cuerpo de un animal, este es su dureza. Volviendo a un ejemplo coloquial, es más fácil rayar, con por ejemplo una navaja, una superficie de plomo que una de cobre. Lo cual significa también, que el proyectil tendrá un rendimiento diferente en el impacto.

Las consecuencias cinegéticas de estas propiedades físicas diferentes, en cuanto al material, se sustancian en una penetración notablemente mayor para los proyectiles de cobre. Esto hace que estos tipos de proyectiles sean muy adecuados para animales especialmente correosos con encarnaduras densas o tejidos duros. Es por ello que es especialmente importante ponderar esta circunstancia a la hora de elegir el calibre y el tipo de punta, si nos decantamos por el cobre o aleaciones del mismo.

Precisión

Vaya por delante, que las pruebas de precisión que hemos realizado sobre 100 y 200 m, han arrojado unos magníficos resultados. Bien es cierto que se ha utilizado una munición de calidad, con un rifle y óptica en consonancia, suministrado por uno de los distribuidores más importantes de nuestro país. Este ha colaborado cediendo para el test el material necesario, que como decimos, ha sido de primer nivel.

Como hemos podido ver en el apartado anterior, los proyectiles de cobre a igualdad de peso y calibre, resultan más largos por el menor peso específico del cobre y sus aleaciones, lo que requiere de un giro más rápido para estabilizarlos. Aprovechando su mayor capacidad de penetración y dureza de proyectil, deberíamos pensar en balas más ligeras, con alto coeficiente balístico y con mayor velocidad. Estas tendrán una trayectoria más tensa (menos caída) siempre y cuando empleemos un paso de estría adecuado. También proporcionará un menor retroceso, aunque tendremos algo más de sensibilidad al efecto del viento. En resumen, podremos aprovecharnos de sus características intrínsecas para tener trayectorias más tensas, sin una merma excesivamente importante en otros aspectos.

La construcción de proyectiles monolíticos de cobre de calidad se realiza mediante mecanizado. Esto hace que adolezcan de algunos problemas inherentes a la construcción de proyectiles de núcleo de plomo encamisados y que solo los fabricantes de calidad son capaces de salvar para garantizar la precisión. Por citar algunos: los grosores no uniformes de la chaqueta metálica o la concentricidad entre el cuerpo de la bala y la cola del bote, que producen inestabilidad giroscópica durante la rotación.

Con esto quiero señalar que realmente, en cuanto a construcción, es más difícil conseguir un proyectil tradicional cercano a la perfección, al intervenir más elementos, que uno monolítico que sólo dependerá de la calidad de la maquinaria de mecanizado. La construcción de estos últimos es relativamente más simple al fin y al cabo.

Expansión

Este es un aspecto algo controvertido del que no hay muchos estudios con cierto rigor hasta el momento. Aunque en base a la experiencia de la comunidad de cazadores en diferentes foros y algunas pruebas de evaluadores norteamericanos, está demostrado que la velocidad juega un papel directamente proporcional en la expansión de las balas de cobre. Así también lo indican los fabricantes, cuanto mayor sea la velocidad, mayor será la expansión del proyectil y más grande será la cavidad de la herida producida.

Existen algunas referencias interesantes, como por ejemplo, un estudio forense del 2013 sobre una muestra de 65 animales abatidos, titulado ¿Las balas de rifle de caza sin plomo son tan efectivas para matar la vida silvestre como las balas de plomo convencionales? Una comparación basada en el tamaño de la herida y la morfología, incluido en la publicación Science of The Total Environment, en el que parece claro que en rangos cortos (50-150 m) los proyectiles expansivos de cobre de calidad, cumplen sin problemas y poco se diferencia de las prestaciones de los proyectiles compuestos de plomo.

Para distancias mayores y dependiendo de la calidad del proyectil, en cuanto a su forma y aleación, la expansión se seguirá produciendo, aunque en menor medida según vaya decreciendo la velocidad. Comparativamente con un proyectil tradicional, a igualdad de peso y calibre, es por encima de los 300 m cuando los proyectiles de cobre se ven ligeramente superados en cuanto al diámetro de expansión, algo que compensan sobradamente gracias a su alta retención del peso. Para tener un orden de magnitud, de acuerdo a unas pruebas realizadas por el portal huntingwithnolead.org, a 400 m la expansión de conocidos proyectiles con contenido de plomo era de aproximadamente de 2x frente al 1,8x del Barnes TSX.

Otra razón más para utilizar proyectiles algo más ligeros, con mayor velocidad en todo rango de distancias, de esta manera compensaremos la expansión del proyectil acercándonos al de construcción tradicional más pesado.

  Proyectiles de Cobre vs Plomo Barnes TTSX
Proyectiles de Cobre vs Plomo Barnes TTSX
 

Expansión de un proyectil Barnes TTSX.

Fragmentación

Es precisamente esa retención del peso, a la que nos referíamos en el apartado anterior, para una penetración profunda, junto a su capacidad de crear cavidades de herida amplias, la que permite a los fabricantes sugerir balas ligeras de cobre a los cazadores en los cartuchos de caza mayor.

Por ejemplo, un peso de punta típico para un gamo utilizando el 270 Winchester es de 130 grains, cuando se usan las balas con núcleo de plomo, que se suelen fragmentar o perder parte de su peso al golpear al animal. Con el cobre, no hay pérdida de peso e incluso cavidades de herida más amplias con velocidades incrementadas, por lo que una opción comparable es utilizar balas de 110 gr. El beneficio para el tirador será un retroceso más ligero y por lo tanto, disparos más precisos.

Hablando de la fragmentación, hay otro aspecto a considerar, que es el del deterioro de parte de la carne cuando se rompen los proyectiles que contienen plomo. Según sea el caso y la calidad de la bala, estas pueden perder desde un mínimo del 5% hasta cerca del 35% del peso. Algunos estudios indican que fragmentos de plomo pulverizados, pueden viajar a una distancia de entre 5 cm (2") a 46 cm (18") del canal de la herida. Esto naturalmente no ocurre con los proyectiles de cobre, que habitualmente retienen cerca del 99% de su peso, con lo que apenas se desaprovecha carne de la presa. Señalar que en el mercado existe alguna punta de cobre de fragmentación controlada, en el que los pétalos después de hacer el efecto de tuneladora se desprenden, aumentando el tamaño de la herida.

  Proyectiles de cobre vs plomo fragmentación de los proyectiles con plomo
Proyectiles de cobre vs plomo fragmentación de los proyectiles con plomo
 

La fragmentación de los proyectiles con plomo se da a altas velocidades.

Otras consideraciones

Finalmente indicar algunos aspectos menores, que hacen diferentes a los proyectiles de cobre frente a los tradicionales con plomo en su composición. Uno de ellos tiene que ver con la dureza del cobre señalada anteriormente y que hace que el desgaste del ánima del cañón sea mayor. Aunque esto lo debemos tomar con relatividad, ya que la cantidad de disparos que realiza de media un cazador en España, hace imposible que este pueda llegar a percibir, durante su vida, una pérdida de precisión por esta razón. Aún así con todo, como veremos, hay fabricantes que dotan de tratamientos exteriores a sus balas para evitar este problema.

El coste de la munición de cobre es notablemente mayor que la estándar que contiene plomo, en algunos casos puede acercarse al doble si hablamos de municiones de calidad. Ahora bien, hay que considerar que en cada temporada de caza no son muchos los cartuchos que se emplean y que porcentualmente, con respecto al resto de gastos asociados a la actividad cinegética, es una cantidad relativamente pequeña. A este respecto cabe preguntarse que pasaría si toda la munición de caza mayor fuese de cobre. El impacto en la demanda de este metal no sería pequeño, por lo que es posible que incrementase el precio.

La munición evaluada

A la hora de plantear el material para realizar las pruebas para este artículo, nos decidimos por el 300 Win Mag por ser uno de los más populares y empleados en muchas de las modalidades de caza de nuestro país. Aunque como he comentado en otros artículos, es un calibre absolutamente sobredimensionado para nuestra caza. Aunque sus ventajas son obvias: es capaz de abatir toda la fauna europea y americana, es terriblemente versátil ya que tiene una enorme variedad de proyectiles disponibles en el mercado, aunque por el contrario no es un calibre especialmente agradable de disparar. Concretamente la munición que empleamos en las diferentes pruebas fue Barnes VOR-TX.

Barnes VOR-TX

Borchers es distribuidor exclusivo de los productos Barnes en nuestro país, el cual tiene en su catálogo la munición libre de plomo Barnes VOR-TX, eligiendo el cartucho con punta Barnes TTSX de 180 grains para las pruebas de campo.

  Proyectiles de cobre vs plomo Munición Barnes VOR-TX
Proyectiles de cobre vs plomo Munición Barnes VOR-TX
 

Munición Barnes VOR-TX con proyectil Barnes TTSX con proyectil de 180 grains.

Proyectil Barnes TTSX

Esta punta es la empleada en la munición la Barnes VOR-TX. El TTSX (Tipped TSX) aparece en 2008, la diferencia con la TSX anterior además de la obvia y distintiva punta de plástico azul, es el tamaño del hueco o canal, CUATRO veces mayor en las TTSX, lo que acelera su expansión. Todas estas características añadidas mejoran ya de por sí el ya el alabado comportamiento de la TSX.

Características Principales de la bala TTSX:

  • Proyectil de cobre puro al 99%.
  • Bandas de rozamiento de alivio de presión, que además permiten la evacuación de residuos de cobre.
  • La punta de plástico mejora el coeficiente balístico (BC) de forma notable y acelera la expansión del proyectil, manteniendo prácticamente el 99% de la masa. El coeficiente balístico del proyectil en el 300 Win Mag es de 0,484.
  • Si impacta en huesos duros mantienen aún una retención de al menos 85% cuando los proyectiles de plomo convencionales se fragmentan o directamente se desintegran.
  • En ambas puntas los cuatro pétalos cortantes, que doblan el diámetro de la bala, giran a una elevada velocidad giroscópica produciendo un efecto devastador.
  • La expansión es ya importante a solo tres cm de la superficie de la piel.
  • La penetración normal es de media un 28% mayor que los proyectiles de plomo, por lo que su letalidad es sensiblemente superior.
  • En pruebas que hemos realizado con rifles de caza y precisión, es habitual alcanzar agrupaciones submoa sin dificultad. La variedad de tamaños y pesos de puntas es realmente extensa, abarcando los calibres más habituales en nuestro país.

Pruebas de campo

En cuanto a las pruebas de campo, estas han pretendido abordar los aspectos claves comentados anteriormente y que un usuario exigirá a las relativamente nuevas municiones de cobre y otras aleaciones. Su balística de efectos (penetración, expansión y fragmentación) y su precisión, comparándolas con la munición tradicional compuesta de plomo. Para ello hemos realizado una pequeña batería de pruebas, que como ya adelantamos, vienen a ratificar lo expuesto en los anteriores apartados tratados en este artículo. Estas pruebas han sido posible gracias a la cesión de material del distribuidor Borchers.

Prueba de balística de efectos

Para la prueba de balística de efectos nos servimos de cuatro bloques de jabón balístico de una empresa austriaca especializada, cada uno con una medida de 15x15x30 cm y un peso de 7 Kg. Con un simple cálculo, poniendo en relación su volumen y peso, veremos que su densidad es de 1.037 kg/m3, una medida similar a la de los bloques de gel balístico estándar, que se mueven alrededor de los 1.060 kg/m3. El porqué, emplear jabón y no gel, se debe a que el jabón deja impreso de forma permanente el efecto terminal, que en el caso del gel solo se puede observar con una cámara de alta velocidad. Algo que nos permitió hacer una fácil comparativa y evidenciar gráficamente, las diferencias entre los dos tipos de proyectiles evaluados, frente a uno tradicional de plomo encamisado.

Como el calibre evaluado era el poderoso 300 Win Mag y por referencias de otras pruebas anteriores, fue claro que se necesitarían dos bloques dispuestos en línea para poder analizar los efectos del proyectil. Estos se dispusieron a 50 m de distancia de la línea de tiro, se empleó un rifle STEYR Mannlicher SM12 SX proporcionado por también Borchers y se tiró tumbado con un banco de tiro CALDWELL Lead Sled DFT 2. Como referencia de partida para poder comparar los proyectiles de cobre, empleamos munición de plomo con chaqueta metálica con puntas de 180 grains y un coeficiente balístico de 0,481. Estas pruebas se realizaron en el campo de BREZALES TIRO, en Hazas de Cesto en Cantabria.

Los resultados obtenidos en el test para esta munición de plomo, muestran una brutal deformación en el primer bloque, debido gran cantidad de energía cinética liberada por la alta velocidad de entrada del proyectil, entorno a los 884 m/s (2900 fps). Como podemos ver, en el jabón ha quedado impresa la gran cavidad temporal generada, que casi ha llevado al borde de la ruptura al material. Esta deformación causa compresión, distorsión y desgarro del jabón, similar a que haría sobre tejidos animales. Por otra parte, como era de esperar, esta velocidad a su vez ha provocado la fragmentación de la bala, proyectándose pequeños trozos de la misma a lo largo de todo canal. La penetración alcanzada ha sido de 38 cm.

  Proyectiles de cobre vs plomo efecto de la munición con plomo sobre bloques jabón balístico a 50 m. Vista lateral
Proyectiles de cobre vs plomo efecto de la munición con plomo sobre bloques jabón balístico a 50 m. Vista lateral
 

Efecto de la munición con plomo sobre bloques jabón balístico a 50 m. Vista lateral.
  Proyectiles de cobre vs plomo efecto de la munición con plomo sobre bloques jabón balístico a 50 m. Vista frontal
Proyectiles de cobre vs plomo efecto de la munición con plomo sobre bloques jabón balístico a 50 m. Vista frontal
 

Efecto de la munición con plomo sobre bloques jabón balístico a 50 m. Vista frontal.

En el caso del proyectil TTSX, con una velocidad de aproximación al bloque igual a la del proyectil con composición de plomo, podemos observar como la bala ha penetrado 55 cm y se ha conservado prácticamente entera. También se observa una tremenda transmisión de energía a tenor de la deformación del bloque. Como el proyectil se mantiene entero, el canal generado por la onda de cavitación en su avance es muy significativa.

  Proyectiles cobre vs plomo Efecto de la munición Barnes VOR-TX de cobre sobre bloques jabón balístico a 50 m. Vista Lateral
Proyectiles cobre vs plomo Efecto de la munición Barnes VOR-TX de cobre sobre bloques jabón balístico a 50 m. Vista Lateral
 

Efecto de la munición Barnes VOR-TX de cobre sobre bloques jabón balístico a 50 m. Vista Lateral.
  Proyectiles de cobre vs plomo Efecto de la munición Barnes VOR-TX de cobre sobre bloques jabón balístico a 50 m. Vista Frontal
Proyectiles de cobre vs plomo Efecto de la munición Barnes VOR-TX de cobre sobre bloques jabón balístico a 50 m. Vista Frontal
 

Efecto de la munición Barnes VOR-TX de cobre sobre bloques jabón balístico a 50 m. Vista Frontal.
  Proyectiles cobre vs plomo Vista proyectil TTSX a través del bloque de jabón balístico
Proyectiles cobre vs plomo Vista proyectil TTSX a través del bloque de jabón balístico
 

Vista del proyectil TTSX deformado a través del jabón balístico.

Para la prueba de precisión utilizamos un conjunto visor rifle proporcionado por el distribuidor de la munición.

Con la Barnes VOR-TX empleamos un STEYR Mannlicher SM12 SX con visor Bushnell Elite Tactical 4,5-30x50 en segundo plano focal. Las características más significativas de este rifle son su cañón conocido como de contorno en hélice de 635 mm (25"), culata de polímero, su disparador con pelo francés de tan solo 230 g y peso total del arma de 3,4 Kg.

  Proyectiles de cobre vs plomo STEYR Mannlicher SM12 SX con visor Bushnell Elite Tactical 4,5-30x50
Proyectiles de cobre vs plomo STEYR Mannlicher SM12 SX con visor Bushnell Elite Tactical 4,5-30x50
 

STEYR Mannlicher SM12 SX con visor Bushnell Elite Tactical 4,5-30x50.

Las pruebas se realizaron en el campo de tiro de 200 m de Txoriarte en Zambrana (Álava), en un día con buena climatología, sin viento y a una temperatura ambiente entorno a los 24°. Al tratarse de un rifle netamente de caza, seguimos un protocolo de tandas de tres disparos en un tiempo máximo de cinco minutos, con descansos entre tandas de aproximadamente 10 minutos. La posición de tiro fue sentado, desde una mesa tipo Bench Rest con un banco de tiro Caldwell modelo Lead Sled DFT II.

Se dispararon unos 30 disparos aproximadamente, con muy buenos resultados, ya que salvo alguna diana inicial en la que se verificó el comportamiento del rifle a diferentes cadencias de tiro, el resto estuvieron por debajo del MOA para tres disparos. Como se trataba de un rifle nuevo, se realizó un rodaje informal previo en una jornada anterior. Se utilizaron dos tiradores diferentes, moviéndose la precisión del arma entre los 0,80 y 0,55 MOAs, con una mejor diana de 0,55 MOAs.

  Proyectiles de cobre vs plomo Mejor diana Steyr Mannlicher SM12 SX a 200 m
Proyectiles de cobre vs plomo Mejor diana Steyr Mannlicher SM12 SX a 200 m
 

Mejor diana Steyr Mannlicher SM12 SX a 200 m.

Resumen

Los resultados de las pruebas confirman que el proyectil de cobre utilizado en este reportaje, es una alternativa válida y eficaz a los tradicionales en el 90% de los casos, siempre que conozcamos sus características y limitaciones. A la hora de seleccionar la munición, se debe optar por una bala algo más ligera y por tanto más rápida que la utilizada con plomo habitualmente. Esto garantizará su expansión y gracias a su dureza, nos permitirá obtener rendimientos similares.

Aunque esta fortaleza es a la vez su debilidad, en tanto que para disparos a larga distancia, la pérdida de velocidad condiciona la capacidad aniquiladora del proyectil. Por tanto, podemos concluir que, aunque este proyectil da cobertura a la mayoría de las modalidades de caza, es en la cada día más popular modalidad a larga distancia, donde el plomo sigue reinando en solitario por falta de alternativas.

Más información: Borchers

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