La caza, un recurso en peligro
En el Reino Unido acaba de ser publicado un estudio sobre la importancia económica de la caza. Este estudio, coordinado por 16 organizaciones relacionadas con el mundo rural y la caza, concluye afirmando que en el Reino Unido la caza tiene una repercusión económica de unos 2 billones de libras anuales (una libra = 1,25 euros) y genera 74.000 puestos de trabajo a tiempo completo.
Además, según este estudio, más de las dos terceras partes del campo inglés están gestionadas para cazar en él y se invierten más de 250 millones de libras al año en medidas de conservación y gestión para favorecer no solo a las especies cinegéticas, sino también a las protegidas. Especialmente en las zonas rurales, la caza constituye una de las actividades socio-económicas más importantes y su prohibición implicaría la pérdida de un importante número de puestos de trabajo directos e indirectos, además de perjudicar de forma muy sensible a la conservación de la naturaleza. El estudio dedica un apartado a la importancia económica de la caza en otros países de la Unión Europea, concluyendo que la caza genera solo en la Unión Europea unos 16 billones de libras al año. Sin lugar a dudas es España uno de los países de la Unión Europea en los que la caza genera mayor flujo económico y puestos de trabajo. Después de Francia, nuestro país es el que tiene el mayor número de cazadores y se ha convertido en el destino preferido de un importante número de cazadores extranjeros que acuden a nuestro país atraídos por la posibilidad de practicar ciertas modalidades de caza, o cazar especies únicas que solo encuentran en nuestro país. Solo por eso nuestro Ministerio de Empleo y Seguridad Social debería haber sido especialmente cauteloso a la hora de iniciar su reciente actividad, inspectora y sancionadora. Su exceso de celo y su falta de información están poniendo en serio peligro no solo la práctica de una modalidad de caza única como es la montería, sino también a lo que se ha venido a llamar la marca España que tanto nos está costando vender fuera de nuestra frontera. Espero que aún estemos a tiempo de resolverlo.
