Los jabalíes gallegos atacan a los conselleiros de la Xunta

No es broma. Este artículo parece carnavalesco, pero sabe lo que dice y dice la verdad. Este artículo no tiene picardía y mucho menos maldad.


En menos de 40 días, dos ilustres próceres gallegos han sufrido percances con los jabalíes por las carreteras de esa Galicia profunda a la que adoro sin paliativos. Pero al Mundo Rural, fundamentalmente, pues al otro le conozco poco. Ya di cuenta y razón de cómo la más alta jerarquía gallega topó con dos jabalíes cuando venía de hacer campaña política. Sí, sí, sí. El Ilustrísimo señor Alberto Núñez Feijóo, presidente de la Xunta de Galicia, dijo en su día, y lo sigo teniendo bien guardado, pues a la noticia les he hipervinculado, una vez más. Dijo, que: torear tiene más mérito que cazar. Qué facundia sin venir a cuento. Como si no hubiera en Galicia cosas más urgentes que arreglar. ¿O tal vez intentaba demostrar a su paisano, don Mariano Rajoy, que era capaz de nadar y guardar la ropa en los Madriles del Rey de España? A saber. El señor Feijóo quería demostrar con su saber taurino que podía estar a la altura de las circunstancias en la Monumental de las Ventas. Esto se puede deducir del Señor Núñez Feijóo a la vista de un brillante currículum político que deja a Spider-Man como a una simple araña de alcoba. Es uno de los hombres más polivalentes de Europa. Resulta que tan ilustre prócer, venía de dar un mitin en Lalín y a punto estuvo de pasar a ser difunto por dos jabalíes que le dejaron el coche oficial para un buen arreglo a cuenta del erario público. ¡¡¡Faltaría más!!! Claro, a los transportistas gallegos les pasa lo mismo que a al señor Núñez Feijóo y no les arreglan los camiones por el morro y se cabrean, y protestan, y… hágales caso, señor Feijóo, que son los mejores embajadores que tiene Galicia en el Mundo entero. Pero es que 40 días después transitaba por Silleda (Pontevedra) nada más y nada menos que don Agustín Hernández, conselleiro de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras, cuando su coche se pegó un zaporcazo con un jabalí. Señores conselleiros, en vez de hacer brindis a los tendidos taurinos, faciliten a sus técnicos los trabajos debidos, pues tienen en la Xunta a los mejores funcionarios de España. Y hagan algo de una vez para que no estén todos los días en los diarios por culpa de los suidos. Para que usted me entienda, Señor Núñez Feijóo: están ustedes en coplas, como la Dolores, la flor de Calatayud. Claro, al señor Núñez Feijóo hay que dirigirse a él en términos taurinos o folklóricos más hermanados con el arte de la tauromaquia que con la literatura de Alvaro Cunqueiro, de quien por cierto, ahora va a celebrarse su centenario. ¡¡¡Oléééé…!!! Arsa que toma y olé, que viva la grasia… con un alfilé clavao en mitá del corasón… ¿Saben ustedes, señores conselleiros, que si no se cazara en Galicia durante dos años hacían imposible la circulación por carreteras y darían al traste con toda la agricultura? PREGUNTEN A SUS TÉCNICOS Y A SUS FEDERACIONES Y NO NOS TOQUEN LOS… No tienten a la suerte. Que cazadores quedamos pocos y no hay relevo generacional. Y si atentan contra los jabalíes de forma biológica, lo mismo se llevan por delante a su primo hermano el cerdo (a los primos del jabalí, me refería). ¡¡¡Cuidadín!!! Que dice Chiquito de la Calzada (natural de Málaga). No puedo, no puedo… Bonanzaa… CON EL DEBIDO RESPETO A mi párrafo anterior no lo he revestido de la formalidad debida. Eso es cierto. Ni hago regalías a ningún oído que no conozca a fondo. Pero no es menos cierto que al evocar lo que sigue, casi se me escapa un lagrimón. Pues tengo in mente la muerte causada por un ciervo el pasado 14-12-2011 a un ingeniero de Montes de Burgos. Me refiero a José María Núñez García, de 52 años y natural de Regumiel de la Sierra (Burgos), vivía en Burgos y trabajaba de encargado en la empresa Maderas Pablo Arroyo de Vilviestre del Pinar. No son para hacer bromas las graves heridas causadas por un jabalí a una señora que cosechaba setas en Huerta del Rey (Burgos) el pasado 20-11-2011. Tengo un rosario de cuentas infelices, pero sólo me queda rezar por quienes en accidentes perfectamente evitables, están parapléjicos o en el más allá. Con esto, ni una broma. Con esto, sólo cabe rezar. En el tema de los accidentes de carreteras con especies venatorias se está tentando mucho a la suerte y ningún gobierno ha hecho nada de fundamento salvo llevarse un Carlos III otorgado por la Real Federación Española de Caza un político que dijo que iba a hacer y no hizo. ¿Ya puede? Al diario de sesiones de las Cortes les remito.
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