Abundancia del conejo de monte

La población de conejos depende de los virus y vacunas manejados por los humanos. Hablar de virus y vacunas en estos tiempos tan ingratos, produce escalofrío.


El Instituto de investigación en recursos cinegéticos (IREC), organizó del 16 al 18 de noviembre de 2020 unas jornadas sobre «El papel de la caza en la gestión de la sobreabundancia de Especies Cinegéticas». Estaba invitado para exponer en unos minutos mi impresión al respecto y preparé para la intervención este trabajo en el que trato de demostrar que los daños, las capturas para remitirlos y las poblaciones resultantes de esta especie imprescindible para la biodiversidad del medio, en los últimos 65 años han estado condicionadas por las enfermedades víricas introducidas por el hombre en el medio que se transmite entre países, incluso en las antípodas, en poco tiempo. No pude intervenir en la mesa, debido a problemas técnicos. He aportado este texto, base de mi participación prevista para este análisis de la función reguladora de la caza que ha organizado el IREC y que los cazadores agradecemos.

El Conejo de Monte (Oryctolagus cuniculus), es especie originaria de la Península Ibérica desde hace un millón de años, en la que hay dos subespecies: O. c. cuniculus y O. c. Algirus. España le debe su nombre en fenicio i-shepha-im y romano Hispania. La especie pertenece al Orden Lagomorpha, en el que se incluye la familia Leporidae que engloba también a la liebre. El conejo es la pieza de caza que dispuso y dispone de mayor número de modalidades y métodos de caza entre las cincuenta y tres especies cinegéticas actuales en España y es la que ha soportado más jornadas de caza en la historia de la actividad venatoria (1).«Hace 18.000 años y a juzgar por los documentos de las cuevas de Nerja, Molí del Salt, Tossal da Roca o Picareiro, el conejo figuraba de igual a igual con los grandes ungulados en la mesa de las últimas poblaciones paleolíticas del sur de la Península Ibérica». (2.

Todos los expertos coinciden en que el conejo es el mayor recurso trófico del ecosistema mediterráneo que ampara a cuarenta y dos predadores, entre ellos dos especialistas notables en peligro: el lince (72% de su ingesta) y el águila imperial (20-75%). (3). El conejo es un gran aliado de la diversidad biológica y su abundancia es una garantía para la mayoría de especies animales que comparten territorios con él. Todos los observadores de la naturaleza sabemos que la mejor defensa para las aves como alaúdidas, la perdiz roja o las esteparias es una nutrida población de conejos. Por todas esas razones los cazadores hemos buscado con ahínco la recuperación del conejo infectado por virus inducidos por el hombre, sabiendo que puede producir daños agrícolas que también pagamos los cazadores. Aquellas cualidades del conejo impulsaron a la RFEC en la búsqueda de vacunas que supusieron muchos esfuerzos y dinero, pero con las que no tuvimos éxito. Este resumen cronológico está hilvanado sobre la tendencia de las capturas del conejo en los últimos cuarenta años y su quebranto a la baja cada vez que ha aparecido una nueva enfermedad inducida, —hecho que queda perfectamente contrastado en las tablas de capturas adjuntas— (4).


Dos conejos a punto (J. Manzano)

Mixomatosis: El mayor desastre ecológico del siglo XX

1896— Giuseppe Sanarelli fue desde Siena a fundar un instituto en Montevideo y llevó unos conejos para hacer pruebas de laboratorio y cruzarlos con otros del lugar. Los conejos europeos murieron, pero no los otros americanos (del género silvilagus) que convivían con ellos y eran los portadores originales del virus de la mixomatosis. El virus se conservó durante 55 años como arma biológica.

1950.— Un colono inglés, Thomas Austin, para repoblar o cruzar con los conejos de una granja había llevado a Australia en 1859 unos conejos silvestres que se multiplicaron exponencialmente. Para combatir a la plaga imparable de conejos australianos, se diseminó en 1950 aquel virus de la mixomatosis en cinco zonas del estado de Victoria y se produjo la desaparición de varios millones de conejos; algunos autores señalan 500 millones.

1952.— En Francia, Armand Delille, se hizo con el virus de la mixomatosis, que dos años antes se había liberado en Australia y lo inoculó a conejos de su finca francesa. Al año siguiente el virus entró por Llansa (Gerona) y quedó a España prácticamente sin conejos. Esta gran epizootia del conejo se produjo en la mayor parte del país durante el quinquenio 1955-1960. Con la llegada del virus de la mixomatosis, que dejaba a los conejos ciegos y sin olfato, se produjo la muerte del 90% de las poblaciones afectadas.

A partir de la temporada 1960-61, se habían empezado a recuperar lentamente de la mixomatosis las poblaciones de conejos al crear anticuerpos contra el virus de la enfermedad y esa tendencia se mantuvo hasta 1988 cuando apareció el virus hemorrágico (RHDV). En muchas zonas el conejo casi desapareció y las vacunas para ambas enfermedades tardaron en llegar, aunque las anunciaban como inmediatas. La cepa vírica de la mixomatosis tuvo mutaciones en 1978 y apareció una nueva variante de ese virus que descolocó a todos los estudios ya avanzados para una vacuna que se logró por fin en 1985.


Dos conejos copulando (J. Manzano)

La FEC realiza la primera campaña de vacunación de conejos

1985.— En abril de este año la Subdirección General de Sanidad autorizó las vacunas de virus homólogo contra la nueva variante de la mixomatosis en animales de campo, tras ocho meses de prueba en explotaciones industriales de cría. La Federación Española de Caza (FEC) hizo un convenio con los Laboratorios Ovejero (León) y se vacunaron 75.000 conejos en 23 provincias con la vacuna PoxLap, descubierta por José L. Argüello. (5). En los tres años siguientes hasta la aparición de la nueva enfermedad hemorrágica (1988), la mayoría de los conejos adultos portaban anticuerpos contra la mixomatosis y comenzaron las grandes poblaciones de conejos en las comunidades más propicias, por lo que para reducir daños hubo que autorizar todos los finales de primavera su caza intensiva para «descaste». Las características biológicas del conejo de monte (una hembra pare cada año 18 gazapos que con cuatro meses son adultos), provocaban grandes poblaciones en alguna comarca y un problema para la agricultura y los cazadores. Según la dinámica poblacional del conejo, cien adultos en febrero proporcionan trescientos en setiembre. (6)

Virus hemorrágico. (RHDV).

1988.— En Asturias, luego León, Zamora y Murcia se detectó en marzo de ese año, según fuentes de Adena, una nueva enfermedad, la vírica hemorrágica (RHDV), que remata del 55 al 75 % de las poblaciones que se salvan de la mixomatosis. El periodo de incubación del virus dura de dos a tres días con una mortalidad cercana al 100% de los conejos adultos, pero quedan inmunes los gazapos de menos de dos meses. Cuatro años antes en Australia y Nueva Zelanda fue introducido este virus, que procedía de China, como agente de control biológico del conejo silvestre, ante la gran plaga que asolaba esos países de nuestras antípodas. Llegó a España cuando el conejo se recuperaba de la mixomatosis y las capturas eran ya cercanas a los once millones por temporada.

El declive de la especie, provocado por el nuevo virus hemorrágico que llegó en 1988-89, supuso la pérdida de más de 7.316.000 capturas de conejos (-67%) en las cinco temporadas siguientes hasta la 1993-94. En la temporada siguiente, 1994-95, comenzó la recuperación que se ha mantenido durante dieciséis temporadas, hasta la 2008-09.

La aparición de esta segunda enfermedad RHDV, que provocó la caída de las capturas a menos de un tercio de las obtenidas cinco años antes, alarmó a los cazadores que pedían que la RFEC tomara las iniciativas necesarias para parar el severo declive del conejo. La RFEC propulsó un proyecto que en dos ocasiones seguidas dio resultados negativos y nos costó mucho dinero.

Otros proyectos, también muy costosos, realizados por entidades científicas que buscaban también la recuperación del conejo para abastecer al lince y el águila imperial, con otros procedimientos que no requerían vacunación, tampoco obtuvieron resultados positivos.

La RFEC patrocina dos proyectos de una vacuna contra las dos enfermedades. Convenio de la RFEC con el INIA y los laboratorios HIPRA.

1996-2002.— La Real Federación Española de Caza (RFEC) firmó un convenio con el INIA (Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación) y los laboratorios HIPRA (Gerona), y patrocinó un proyecto para la creación y desarrollo de una vacuna viva de virus homólogo recombinante, que fue coordinado por el Dr. Sánchez-Vizcaíno y desarrollado en el CISA-INIA, participando los investigadores: Juan Mª Torres y otros. Contó además con la colaboración de investigadores externos al INIA como Francisco Parra, Javier Lucientes y Albert Pagès (laboratorios HIPRA). El proyecto de HIPRA desarrolló la vacuna denominada LAPINVAC, que según el informe del laboratorio, protegía durante seis meses al 100% de los conejos inmunizados directamente con la vacuna y desarrollaron elevados títulos de anticuerpos tanto frente al virus mixoma como frente a RHDV. En ensayos de transmisión realizados en la Isla del Aire (Baleares) en torno al 40% de los conejos no inoculados desarrollaron títulos de anticuerpos contra los dos virus. Esta información que resumimos se la dieron a la RFEC los Laboratorios HIPRA y la contrastaron todos los actores científicos. Los resultados fueron publicados por Juan Mª Torres en la revista científica Vaccine 19-2001. PP 4536-4543. Los laboratorios HIPRA, en enero de 2001 presentaron la vacuna ante la Agencia Europea del Medicamento (EMEA), que pidió la ejecución de algunos ensayos a HIPRA. En Junio de 2002, HIPRA retiró la petición de la vacuna para evitar denegación de la EMEA, al no haber realizado los ensayos requeridos, pues no dispuso de un animalario para ello. (7).

Convenio de la RFEC con INIA, Biodiversidad y los laboratorios SYVA

2004-2011.— La Real Federación Española de Caza emprendió un nuevo proyecto de creación de otra vacuna similar en el que participaron en pagos y derechos: el INIA (33"80%), la Fundación Biodiversidad (18"65%), los laboratorios SYVA (13"75%) y la propia RFEC (33"80%). El proyecto se inicia con el desarrollo por laboratorios SYVA S.A. de la vacuna basada en la cepa de virus recombinante 6918VP60 (la misma que fue elaborada por HIPRA) a la que se denomina ahora ISPANVAC.

La vacuna resultante dispuso de todos las virtudes esperadas, a falta de las pruebas de campo. El 100% de los conejos vacunados quedan protegidos, durante más de un año, frente a desafíos letales con los virus de la mixomatosis y de la RHDV, lo que permitirá a esos conejos la cría de las camadas habituales en ese tiempo. La vacuna es estable refrigerada durante más de dos años y medio. En las pruebas realizadas por Laboratorios SYVA S.A. los resultados de transmisión del virus a conejos no inyectados desde otros vacunados en los cinco experimentos contrastados en el laboratorio han sido escasos de 0, 17, 20, 30 y 37%, colocados en orden creciente.

Se hicieron pruebas de campo en Portas (Pontevedra) (2009) y la transmisión fue solo del 3"5% y en Toro (2010) donde la transmisión fue del 0%. Ante este reiterado y mal resultado, las cuatro entidades, previa consulta a la Agencia Española de Medicamentos y P.S. decidieron no presentarlo ante la EMEA, porque aunque la vacuna dispone de excelentes cualidades para vacunar los conejos de granja, no transmite en campo, como requería el proyecto. En esta ocasión, toda la documentación desarrollada quedó en poder de la RFEC y los originales están custodiados por la Fundación Biodiversidad desde 2011. (8)

Cepa nueva de virus hemorrágico RHDV-N11

2011.— En este año se detectó en granjas de Navarra, Aragón, Cataluña y Comunidad Valenciana, además de Galicia y Portugal y seguidamente se propagó por todas las provincias españolas una cepa nueva de la enfermedad hemorrágica, RHDV-N11, que producía extrañamente la muerte de gazapos de 11 a 40 días, cuando era conocido que la enfermedad hemorrágica clásica no afectaba a gazapos menores de 50 días. Los gazapos analizados de Navarra denunciaron la presencia de ese nuevo tipo de virus que era hasta entonces desconocido en España y tenía una estructura diferenciada del virus clásico RHDV (Parra F. 2012 & Dalton K. 2014).

La recuperación de capturas del conejo desde 1993-94 fue tenue pero continua hasta la temporada 2009-10, cuando se superaban ya los 7.178.000 conejos cazados. Por esas fechas llegó la nueva cepa del virus hemorrágico RHDV-N11 y trajo como consecuencia otra caída de capturas durante cinco temporadas de 1.800.000 conejos (2009-10 a 2014-15). A partir de esta última temporada se ha iniciado la recuperación en las tres controladas hasta 2017-18, año en el que desgraciadamente se distribuyó en Australia un nuevo virus, que podría ya estar entre nosotros.

Independientemente de la necesidad de preservar al conejo como custodio y garantía de la diversidad biológica de un territorio, los cazadores hemos hecho esfuerzos adicionales de toda índole para remitir los daños que puede provocar en determinados territorios. Hemos cazado en las dieciocho primeras temporadas de este siglo más de cien millones de conejos (9).

La naturaleza requiere mantener al conejo como especie presa, estratega de la r, que resuelve parte de la predación y todos los actores que participamos en el medio rural y pertenecemos a esta sociedad del siglo XXI debemos aceptar unos daños mínimos como aportación para mantener al conejo de monte, como especie dañina pero imprescindible.

Última cepa de virus hemorrágico RHDV-K5 liberada en Australia en 2017

2017.— En marzo de 2017, el Departamento de Industrias Primarias de Nueva Gales del Sur (el equivalente al departamento de agricultura) liberó un virus llamado RHDV1-K5 en 600 puntos de Australia. El K5 es una variante de un patógeno hemorrágico descubierta en Corea del Sur. Solo afecta a los conejos, pero es letal. (El País. Mayo 2017).

Este virus resiste activo en el medio ambiente durante varios meses. Los conejos mueren en 48 horas y la mortalidad alcanza al 90%. Para aquella variante RHDV-N11 hay ya varias vacunas en España y Europa, pero para la variante RHDV1-K5, no hay ninguna alternativa, dice el prestigioso virólogo que identificó la variante del virus hemorrágico en 2012 (Parra F. 2017).

Aquella mala noticia es muy posible que esta temporada 2020-21 tenga eco en nuestros campos. Será un nuevo desastre para la cinegética, pero sobre todo, para el medio ambiente español. Se debe considerar en las planificaciones para reducir daños del conejo, que sus poblaciones, daños y capturas están muy supeditadas a las enfermedades inducidas por el hombre y que han dispuesto de fluctuaciones importantes en varias épocas, siendo la más reciente la provocada por la enfermedad del virus hemorrágico RHDV en las temporadas (1988-89 a 1993-94) que supusieron la caída de las capturas en 7.316.800 conejos entre ellas. Los expertos consideran que la llegada a España de la nueva cepa RHDV-K5, liberada en Australia en 2017, supondrá un gran quebranto, equivalente en las poblaciones y las capturas.

Salvar al conejo, como regulador indispensable que es del medio ambiente español, y controlar sus poblaciones para evitar daños excesivos, debe suponer el reparto del coste de la siniestralidad residual entre toda la sociedad, no solo a cargo de los cazadores o de los agricultores. La subvención del gobierno a ENESA para apoyar al seguro agrario, fue planteada en este sentido.


Las cuatro CCAA con mayor estimación de capturas por temporada 2000-01 a 2017-18 son: Castilla la Mancha (CLM) (32"52%), Andalucía (24"03%), C. Valenciana (8"89%) y Madrid (7"91%).

Las cuatro CCAA con mayor densidad de conejos por temporada y Km2 en ese periodo son: Madrid (55"03 C.T./Km2), Baleares (44"30 C.T./Km2), Canarias (25"72 C.T./Km2./Datos solo 9 T) y CLM (22"87 C.T./km2)


Modalidades y Métodos de caza autorizados para cazar el conejo de monte. (1)

(12 Modalidades de las 18 existentes en caza menor)

  1. Al salto o en guerra galana
  2. A rabo
  3. En mano
  4. Espera o acecho-chanteo (conejo a la espera)
  5. Reclamo: (Chilla)
  6. Conejo con hurón y red (sin armas)
  7. Conejo con perro «a diente» sin armas, con cayado, garrote o regatón
  8. Conejo con hurón y armas «a toro suelto»
  9. Conejo y zorro en zapeo
  10. Conejo con hurón, podenco y escopeta
  11. Cetrería (Azor)
  12. Caza fotográfica

Métodos Históricos.

•Cepos, Chillo, Hurón y capillo, Alegro, Tapa, Red vertical y perros nocherniegos (Podencos), Cercas trampa. (Podrían habilitarse todos, menos los cepos).

Comparte este artículo

Publicidad