Un pachón, la niebla y un conejo junto al camino
Esperando junto al coche a que levante la niebla, un cazador suelta a su perro para que estire los músculos. Ambos están ansiosos por comenzar la jornada de caza, pero el perro lo demuestra con más ímpetu. No le hace falta alejarse ni del coche ni de su propietario para localizar al primer conejo.
El orgulloso cazador es Toni Fraile. Y este magnífico pachón navarro es Curro. Con solo 19 meses, Toni nos habla de la gran pasión que profesa por la caza. Destaca por una gran nariz y por una muestra muy firme. “Cuando he comenzado a grabar, ya llevaba un tiempo quieto”, nos indica el cazador. También nos comenta que es un perro muy enrazado: “Como buen pachón, es muy inteligente y no se aleja de la escopeta, va siempre muy pendiente de mí”.
Un conejo descubierto
Y es lo que vemos en el vídeo, donde Curro ha localizado a una pieza y su muestra nos indica el lugar exacto en el que se oculta. Lo curioso de esta escena es que su propietario no estaba cazando. Solo había soltado al perro mientras esperaban que levantase la niebla que se resistía a hacerlo a primera hora del día.
Pero curro no entiende de qué va esto de la niebla y él comenzó a buscar en las pocas matas que encontró junto al camino. Y allí su nariz le dijo que había algo. El conejo acaba saliendo y huye por el mismo camino.
“Curro cobra muy bien”, nos comenta Toni. Pero esta vez no lo demostrará. Al haber niebla, la escopeta continuaba enfundada y, además de por estar en el camino, no habrá disparo.
