Madrid

Detenidos los responsables de una protectora por la muerte de dos perros y el maltrato de otros cinco

El centro de protección animal de El Álamo, en Madrid, ejercía ilegalmente de residencia canina. Pero la muerte de dos perros y el maltrato a otros cinco ha terminado con la detención de dos personas acusadas de ser responsables de los hechos.


 Perros muertos en protectora de Madrid residencia ilegal
Perros muertos en protectora de Madrid residencia ilegal

No contaban con autorización, licencia ni control municipal. Aun así, los responsables del centro de protección animal de El Álamo utilizaban las instalaciones de la protectora como residencia canina y felina.


Así estaba la protectora con residencia canina ilegal cuando la inspeccionó la Guardia Civil.

Perros enfermos, desaparecidos y muertos

Hasta que el mal estado, la desaparición y hasta la muerte de varios animales dejados allí para su cuidado llevó a sus propietarios a denunciar los hechos en el cuartel de la Guardia Civil de Navalcarnero. Un perro muerto y dos más desaparecidos llevó a la Guardia Civil a iniciar una investigación que les llevó a realizar una inspección en el lugar de la protectora. Allí encontraron dos perros muertos y otros cinco en estado grave por deshidratación, según han informado fuentes de la Guardia Civil.

Y han sido estos investigadores los que han constatado que el centro de protección animal de la localidad madrileña estaba siendo destinado para un uso ilegal como residencia canina.


Pésimas condiciones en las que se encontraba la residencia ilegal.

Recogían los perros a domicilio para no descubrirlo todo

El modo de actuar de los hasta ahora dos detenidos, ya que hay otra persona investigada, era siempre similar: ofrecían alojamiento canino vía internet y telefónica y recogía a los animales a domicilio. Así se aseguraba que los propietarios no constataran las pésimas condiciones en las que estaban las instalaciones donde albergaba a los perros. Incluso los pagos por estos servicios ilegales los exigía vía Bizum, cobrando entre 7 y 15 euros por día de alojamiento.


Uno de los perros en la residencia canina ilegal.
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