2010, ‘annus horribilis’ para los rinocerontes

El 2010 se recordará en Sudáfrica como uno de los años más negros para el rinoceronte, con una cifra contabilizada de 333 ejemplares muertos a manos de los furtivos.


Sin embargo, como ya avanzamos en enero, a finales de año, nueve personas (entre las que se encontraban dos veterinarios, un cazador profesional, un ranchero, un piloto y un matrimonio propietarios de una empresa de safaris) eran detenidas y acusadas de participar en cientos de incidentes relacionados con el furtivismo de rinocerontes. Pero la persecución del furtivismo en Sudáfrica (que cuenta con el 90% de los rinocerontes blancos del continente) no queda ahí, a principios de 2011 cinco furtivos de rinocerontes murieron en sendos tiroteos con la unidad de élite de la policía de Sudáfrica (los Hawks). Oficiales del parque han dicho que tres sospechosos resultaron muertos en un tiroteo con la policía en la zona de Pretoriuskop del Parque Nacional Kruger. Otros dos resultaron muertos cerca de la frontera con Mozambique. Las autoridades dicen que en la escena de uno de los tiroteos fueron encontrados dos cuernos de rinoceronte y un rifle de caza de gran calibre. Sin embargo, tres sospechosos lograron escapar por la frontera. Los Hawks han reconocido que es difícil atrapar a los autores intelectuales, ya que sólo han sido detenidos los individuos que hacen el trabajo de campo. El cuerno de rinoceronte se utiliza como ingrediente de la medicina tradicional, no sólo en China, sino prácticamente en todo el este y sudeste asiático. Gerhard R. Damm hacía en Africa Indaba un cálculo puramente hipotético con un pequeño ejemplo, según el cual se necesitarían los cuernos de más de 10.000 rinocerontes por año para abastecer de forma sostenible este hipotético mercado sólo en China.
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