Jugando con la muerte: un palomo corteja a una hembra de halcón
El celo del palomo ciega completamente al ave, que intenta cortejar a un ejemplar de una especie que es su predador natural. Se masca la tragedia.
El halcón no debe de tener mucha hambre. Se encuentra sobre una piedra en la que lo ha ubicado el cetrero para que tome el sol. La rapaz, debido a que se halla sin caperuza sobre su cabeza y puede ver cómo el palomo se sube sobre la roca, lo mira con incredulidad. Este llega a rozar en varias ocasiones el plumaje del halcón con su cuerpo, otorgándole la oportunidad de matarlo con sus garras o de un picotazo en la cabeza. Orulla hinchando su pechuga y se contonea girando en torno a su mortal amada sin lograr resultado alguno, solo la indiferencia de la hembra de halcón.
Halcones y palomas, cazadores y presas
El halcón peregrino es una especie de ave falconiforme de la familia Falconidae que habita desde la tundra ártica hasta el sur de América. Es el animal más veloz del mundo, capaz de volar a velocidades superiores a los 100 km/h alcanzando en picado cuando caza más de 300 km/h. Estas aves fueron utilizadas por el ejército alemán durante la Segunda Guerra Mundial para interceptar las palomas mensajeras que utilizaban los aliados para comunicarse, denominándose esta contienda la guerra de los pájaros. Los halcones eran las únicas aves capaces de capturar a las veloces mensajeras, que podían alcanzar velocidades de hasta 140 km/h.
Presenta un color gris azulado en la espalda mientras su parte inferior es blanquecina con manchas oscuras con una cabeza de color negro. La hembra es un 30% mayor en tamaño que el macho, pudiendo pesar entre 910 y 1.500 gramos, mientras que este no supera los 750.
Se alimenta de aves de tamaño medio, pequeños mamíferos y reptiles e incluso insectos.
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