¿Se le está dando un privilegio a los cazadores en el Estado de Alarma? Encendido debate televisivo
Entidades animalistas denuncian que las medidas que permiten a cazadores practicar el control poblacional de especies con sobrepoblación en Castilla-La Mancha favorecerá la propagación del COVID-19.
Hoy, el programa Todo es Mentira de Telecinco ha abordado las denuncias de Proanimal con respecto a la normativa que permite a los cazadores de Castilla-La Mancha acudir a sus cotos para realizar la gestión de las especies cinegéticas con riesgo de sobreabundancia de conejo, jabalí, ciervo, corzo, cabra, gamo, arruí y muflón.
La resolución de la Consejería de Desarrollo Sostenible de Castilla-La Mancha permite los desplazamientos para la entrada y salida de la región para practicar la caza en los terrenos cinegéticos que cuenten con autorización expresa.
Animalistas recurren la resolución
Varias entidades animalistas han recurrido la resolución del Gobierno regional, solicitando su «inmediata paralización cautelar», amenazando con interponer una querella criminal si no se les hace caso.
El programa de Telecinco ha incidido en varias ocasiones en las granjas de especies cinegéticas que existen en la región para referirse a la actividad cinegética. «Vamos, que cazan animales para evitar la sobrepoblación mientras no paran de producir más población» ha asegurado uno de los presentadores del programa.
Debate acalorado
Durante el espacio, han intervenido David Rubio, portavoz de No a la caza, y Carlos Sánchez, de Fundación Artemisan. El animalista ha intentado atacar a la actividad cinegética con postulados manidos y demasiado recurridos en este tipo de debates. Por ejemplo, ha vinculado los accidentes de tráfico con las acciones cinegéticas. Carlos Sánchez, director de investigación de Fundación Artemisan ha desmentido manipulaciones como esta con datos reales al respecto.
Supuesto contacto con un orgánico de Castilla-La Mancha
Desde Todo es Mentira aseguran que han contactado con un organizador de cacerías de Castilla-La Mancha para comprobar realmente si se respeta la normativa que regula el estado de alarma y las autorizaciones.
La redactora del programa ha realizado cuestiones al orgánico en torno a la normativa, como si podrían acompañar sus esposas a los cazadores. También ha preguntado si se soltarían piezas de granja. El supuesto organizador ha confirmado que sí, pero firmando un documento por parte de la propiedad de la finca como justificante de que van a controlar especies objeto de control por sobrepoblación, algo que es del todo ilegal en la actual situación.
Carlos Sánchez ha reconocido que se trata de un ejemplo de mala praxis que mancha la imagen del colectivo y de los acotados que se ajustan a la normativa.