El furtivismo diezma el último santuario de elefantes de África central
El último santuario de elefantes en la región de Sahel, en el África central, está en peligro. Los furtivos y las armas automáticas que utilizan para apoderarse del preciado marfil de los colmillos de los paquidermos que habitan el Parque Nacional de Zakouma, en Chad, han conseguido devolver la población de elefantes de este preciado ecosistema a los precarios niveles en los que se hallaba en 1985.
La WCS asegura que la historia ha demostrado que la recuperación de los elefantes es posible en Zakouma
Fondos insuficientes
El elefante africano está incluido dentro del Convenio sobre el Comercio Internacional de Especies de Fauna y Flora Salvaje Amenazadas, toda vez que ha sufrido un dramático descenso en el número de ejemplares totales. A principios del siglo XX, se calculaba que podrían existir hasta 10 millones de elefantes dispersos al sur del África subsahariana, mientras que hoy por hoy sólo un diez por ciento de ellos continúan viviendo en libertad. La WCS ha establecido una cuenta para recabar ayudas para los elefantes del Parque Natural de Zakouma. Se han realizado distintos esfuerzos por salvar al elefante africano de la extinción por parte de la comunidad internacional, aunque éstos siguen pareciendo insuficientes. El Gobierno de Estados Unidos, por ejemplo, ha aportado desde 1990 18 millones de dólares para esta causa, mientras que los fondos recabados por la WCS, donaciones privadas, fundaciones o corporaciones, entre otras plataformas, ascienden a 74 millones de dólares en el mismo periodo de tiempo.