El Gobierno de esa provincia dio marcha atrás a una medida adoptada el año pasado, que prohibía la matanza de estos animales en los cotos de la zona debido al cruento método utilizado
Esta medida busca devolver a la provincia de La Pampa uno de sus principales atractivos turísticos. El año pasado, la caza del puma había sido prohibida, dado que se comprobó que los animales eran capturados con trampas, anestesiados, vendidos a los cotos de caza y vueltos a soltar, aún sin recuperarse. Esto aseguraba el éxito de los turistas extranjeros que se acercaban a la zona a practicar este deporte, informó el diario La Nación.
A este sistema se lo conoce como
caza garantizada. Los agentes turísticos ofrecen un paquete, que puede alcanzar los 10 mil dólares y se paga con anticipación, y brindan a cambio la seguridad de que el visitante no se va a ir con las manos vacías.
Leandro Di Nápoli, vicepresidente del Club de Caza Mapú Vey Pudú, dijo que en su institución están en desacuerdo con la medida, debido a que sólo existen seis criaderos en La Pampa y, como se trata de establecimientos relativamente nuevos, aún no cuentan con la cantidad suficiente de animales adultos para que participen de esta práctica.
A La Pampa llegan por temporada entre 250 y 300 cazadores, la mayoría provenientes de Europa y los Estados Unidos. Los animales pueden alcanzar un valor de entre los 3.000 y los 4.000 euros.
