Caza un corzo con un espectacular perlado en Asturias
Un especialista en la caza de jabalíes en batida abate un corzo de cuerna asimétrica con un grueso perlado que cubre prácticamente la totalidad del trofeo.
David Fernández, colaborador habitual de Club de Caza y propietario de la cuenta de Instagram y la página de Facebook Batidas Jabalí, es un activo defensor de las modalidades de caza que se practican en el norte de España. Esta temporada, además de cazar este formidable corzo, ha abatido un jabalí con unos colmillos de récord. La medición del trofeo es de 22,5 centímetros de longitud y 2,5 de grosor en los colmillos, y un perímetro de amoladera de 7,4.
La magia de la caza del corzo al rececho
Al pequeño ungulado le rodea un aura de misterio que es capaz de hechizar a todo aquel que se inicia en su caza. A David le ha ocurrido lo mismo que a otros muchos cazadores españoles. El asturiano asevera que: «quién me iba a decir a mí que me iba a enganchar tanto esto de los corzos. Y mira que me lo habían avisado, que su veneno era muy peligroso, pero no he podido resistirme».
El cazador relata el abate de un corzo con un trofeo único
«Este es mi segundo corzo. Después de la experiencia del año pasado, tenía claro que había que repetir. Y en esta ocasión ha sido todavía mejor, hasta el punto de convertirse casi en una obsesión. Un corzo que destaca más por el grueso y su increíble perlado, que por la longitud de su cuerna. No sé si fue su cuerna asimétrica, su llamativa luchadera izquierda o el precioso perlado del que hacía gala, la cuestión es que fue un corzo que desde el principio me entró por el ojo y se convirtió en mi objetivo principal.
Han sido casi dos meses de seguimiento, de ir estudiando sus zonas de campeo y sus movimientos. Esto es lo que realmente me tiene loco de los corzos: lo impredecibles que son. Me lo ha puesto difícil, y he conseguido hacerme con él casi de casualidad, cuando ya lo daba todo por perdido. Qué bien sabe un corzo trabajado, al que has dedicado tantas horas y que tantos días parecía que se lo había tragado la tierra.
Me da igual si es mejor o peor corzo, para mí es el más especial, y el lance me deja un increíble sabor de boca. Lo abatí de un disparo con mi rifle de cerrojo Tikka del calibre .308 Win».
