El irrefrenable celo de este jabalí le lleva a copular con una hembra que lleva tres semanas muerta
Una cámara de fototrampeo estratégicamente colocada filma el efusivo comportamiento de un jabalí que intenta aparearse con el cadáver de otro ejemplar.
Una hembra de jabalí ha muerto en una mancha de bosque muy cercana a una carretera bastante transitada. Lo comprobamos observando las luces de varios faros de vehículos que iluminan la escena, después de que lo indiquen los responsables de Jrada Montes, una cuenta que encontramos en distintas redes sociales que difunde vídeos de fototrampeo grabados en Galicia.
Un jabalí demasiado encelado
“En tiempos de guerra, cualquier agujero es trinchera”. No hay mejor manera de definir la grabación registrada por una de las cámaras de fototrampeo. La introducción revela un dato muy impactante: “Después de tres semanas sigue sin descomponerse. Tampoco se lo comieron los lobos ni otros jabalíes”. Hablan del cuerpo de la jabalina. Pero lo realmente sorprendente llega cuando vemos el vídeo y el comportamiento totalmente encelado de un jabalí macho al que no le importa que su ‘pareja’ no se mueva y desprenda un olor a podrido nada romántico.
Una posible explicación al comportamiento del jabalí encelado
Hay quien sostiene, tras conocer el dato de que esa hembra de jabalí lleva tres semanas allí sin vida, que se sorprende de que aún no se haya descompuesto. Pero el autor del vídeo lo aclara, apuntando que “las temperaturas en esta época son bajas. Posiblemente sea ese el motivo”. En cuanto al contenido del vídeo, otro usuario intenta arrojar un poco de luz a la pasión que demuestra el cochino hacia el cadáver de su congénere:
-“Es muy posible que cuando murió estaba receptiva y en celo, los machos son atraídos por las feromonas y por instinto intenta copular, por eso la desplaza buscando el posible acoplamiento”.
Esto es algo que hemos podido presencia en otras ocasiones. Quizás, la más llamativa la encarne el vídeo que recoge a otro jabalí demostrando la misma efusividad pasional, pero en aquella ocasión, con el tronco de un árbol. La explicación fue la misma. Muy posiblemente, una hembra en celo dejó impregnadas sus feromonas en la madera del árbol y el jabalí no pudiera retener su instinto reproductivo. Si quieres ver el vídeo, te lo dejamos en el siguiente enlace.
