Liebres que esquivan los ataques de grandes águilas reales con espectaculares saltos
La velocidad de la liebre, de más de 70 kilómetros por hora, no es rival para los envites del águila real. Pero este animal cuenta con más recursos para sortear las afiladas garras de la rapaz.
La cetrería depara lances tan espectaculares como los que vamos a ver. En esta ocasión, nos centramos en finales felices para la liebre. No tan satisfactorios para la gran rapaz, que tiene que ver cómo su presa escapa en el último segundo realizando acrobáticos saltos.
El águila real es un ave capaz de desplegar velocidades por encima de los 300 kilómetros a la hora. Esto sucede en los picados realizados para lanzarse sobre un animal que ha descubierto desde alturas elevadas y lo hace en picados prácticamente verticales con las alas recogidas. En esta ocasión, al tratarse de la modalidad de caza en bajo vuelo, la velocidad es mucho menor. A pesar de esto, el ave no tarda en alcanzar a las liebres que huyen a toda la velocidad que les permiten sus patas. Es lo que vemos de nuevo a continuación. No te pierdas el minuto 1:40 para maravillarte con el salto de esta ágil liebre
Los vídeos corresponden a jornadas de caza de los responsables de BullX Training Falconry & Hawking.