Los cazadores gallegos piden licencias gratuitas por su labor de control del jabalí
Ha sido la Federación Galega de Caza la que ha trasladado la petición a la Xunta, argumentando que en tiempos de emergencia cinegética los aficionados acuden a los montes muchos más días y sus gastos se elevan en la misma proporción.
No hay una mejor definición de lo que están realizando los cazadores de jabalí en muchos puntos de nuestra geografía que “labor social”. Una labor que va en favor de agricultores, ganaderos y conductores. Es lo que ha esgrimido la Federación Galega de Caza a la hora transmitir a la Administración autonómica la petición de que las tasas y matrículas de los terrenos de caza (Tecores) y licencias resulten gratuitas para los cazadores.
Emergencia cinegética ‘privada’
La declaración de emergencia cinegética en territorio gallego, afectando a un 85% del suelo autonómico, ha conllevado que se permita lo siguiente:
-Abatir o capturar, sin límite de ejemplares, jabalís de ambos sexos, prioritariamente hembras adultas y subadultas de cualquier edad.
-En las zonas en situación de emergencia cinegética temporal será posible abatir crías y hembras sucesivas de crías siempre y cuando haya una autorización especial previa por parte de la Dirección General de Patrimonio Natural, de acuerdo con el establecido en la Ley de caza de Galicia.
-Se habilitan en estas zonas una serie de herramientas cinegéticas que contribuyan al control de las poblaciones del jabalí, como la ampliación de los períodos en los que se puede ejercer la actividad cinegética, en jornadas que no estén aprobadas en el correspondiente plan anual de aprovechamiento de la temporada 2023-2024 de los Tecores, o la autorización para el uso de medios auxiliares como visores ópticos, detectores electrónicos de paso o presencia de animales y cebaderos de grano o frutos colocados en los cultivos dañados que favorezcan la eficacia y el óptimo aprovechamiento cinegético, faciliten la identificación de los ejemplares y garanticen la seguridad de las personas.
-En las comarcas con declaración de emergencia se podrá autorizar a los propietarios afectados a realizar esperas o esperas en terrenos de régimen cinegético especial -personalmente o mediante terceros- con autorización del titular del aprovechamiento, así como otra serie de medidas que complementen la actividad cinegética reglada y el control de los daños de la especie establecidos en la resolución anual.
Los gastos de los cazadores se multiplican
Esto supone un sobre esfuerzo para los cazadores, como ha manifestado el presidente de la Federación Galega, Luis Eusebio Fidalgo, explicando lo siguiente: “No se trata de que nos paguen por esa labor social de control del jabalí, pero por lo menos que no nos cobren”, explicando que los gastos de los jabalineros son ya de por sí muy altos.
Comenzando con la licencia de caza, con un precio de unos 30 euros de media y ya gratuita para los mayores de 65 años, los seguros obligatorios, las cuotas de los Tecores, la licencia federativa en caso de serlo, examen psicotécnico, tasas de los permisos de armas, gasolina, gastos veterinarios, precios de la munición y las armas… Cientos de euros cada temporada, un gasto que se está convirtiendo en una de las principales razones para que muchos cazadores dejen de serlo cada año.
Una demanda que la Xunta ha prometido estudiar. Los 34.000 cazadores gallegos permanecerán atentos a la evolución de este asunto. Algo que se lleva realizando en otras autonomías desde hace años.