Un cazador lleva un ciervo abatido en una bicicleta
Un recechista sorprende a sus compañeros de caza al transportar el venado que acaba de abatir sobre el cuadro de una bicicleta. Un macho de esta especie de cérvido puede alcanzar los 160 kilos de peso.
No es la primera vez que hemos visto a un cazador trasladando una pieza de caza mediante este medio de locomoción. El colectivo cinegético agudiza el ingenio o no escatima en esfuerzos cuando hay que sacar una res del monte. Hemos visto a cazadores cargando cochinos de gran tamaño a su espalda o haciendo uso de un tractor o un quad para llevar las piezas hasta el lugar de aparcamiento de los vehículos.
Un cazador «jamás abandona en el campo una pieza abatida»
El colectivo cinegético cumple estrictamente esta norma no escrita. De ahí que se hayan extendido, sobre todo entre los aficionados a la caza al rececho y a la espera, los perros de sangre.
La Unión Europea, junto a la Asociación Interprofesional de la Carne de Caza, ha desarrollado durante tres años un proyecto para poner en valor la carne de caza silvestre y fomentar su consumo. El proyecto «Carne de Caza Silvestre de Europa» finalizó el pasado año. El programa, financiado por la Unión Europea y gestionado por ASICCAZA, ha dado a conocer entre los consumidores no cazadores y profesionales de la restauración la calidad de este producto ecológico y los beneficios que supone su consumo para el medio ambiente y la salud.
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