Una corza patea a un águila real cuando captura a su cría
Un cetrero libera del puño a una imponente águila real cuando pasan frente a él 4 corzos. La reacción de uno de los ejemplares al ver que la rapaz ha capturado a uno de los corzos es cocearle para intentar liberar a su congénere.
En la Península Ibérica habita en estado salvaje la subespecie de águila real, Aquila chrysaetos homeyeri. Se diferencia del Aquila chrysaetos chrysaetos del norte de Europa por su menor tamaño y su coloración más oscura. La longitud del Aquila chrysaetos homeyeri se encuentra entre los 79 y los 86 centímetros. El peso de los machos oscila de 3 a 4,5 kilos, mientras que las hembras pueden llegar a los 6,5. Su envergadura está entre los 188 y los 230 centímetros. Según SEO/BirdLife, su población en España era de 2.000 parejas en el año 2021. La especie está incluida como reproductora en la Lista Roja de las Aves de España, con la categoría de NT- Casi amenazada.
La caza del corzo con águila real
Tras consular con cetreros españoles sobre el origen de este vídeo, estos aseguran que no ha sido protagonizado por un cetrero español, ya que son muy pocos los que se atreven a cazar con esta rapaz que ejerce una presión con las garras de 140 kg/cm2.
En España cazan zorros, jabalíes o corzos con águilas reales cetreros como Álvaro Company, reconocido criador de aves rapaces alicantino, o Jordi Isern, veterano cetrero con más de 20 años de experiencia cazando con rapaces, residente en la provincia de Gerona, en pleno Pirineo catalán.
Caza de corzos con rapaces para controlar los daños a la agricultura
Los corzos, junto a los conejos y los jabalíes son las especies cinegéticas que más pérdidas causan en los cultivos en el país. La población de corzos ha crecido notablemente en España en los últimos años. De ahí la importancia de controlar su número.
El cetrero está oculto tras una rotopaca. Espera el paso de los corzos para liberar al águila real hembra que porta en el puño. La rapaz captura el ejemplar del grupo que supone más débil. Pese a que otro corzo trata de liberarlo golpeando con las patas al águila, el ave se aferra de manera inexorable a la presa con las garras.