Este es el vídeo del peligroso rescate de un perro de caza atrapado en una fuente
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Este es el vídeo del peligroso rescate de un perro de caza atrapado en una fuente

La jornada de caza para los rehaleros no finaliza una vez ha terminado la montería. Al concluir la cacería, comienza la recogida de los canes. Esta historia, una vez más, demuestra cómo un rehalero nunca deja a uno de sus perros atrás. Cueste lo que cueste.


Ana Pinelo, rehalera que ostenta el cargo de responsable en la Sección Mujer Rehalera dentro de la Asociación Española de la Rehala, desea aprovechar estas líneas para hacer un llamamiento a los propietarios de fincas, "hay que mallar pozos, fuentes o minetas, son trampas mortales para nuestros perros e incluso para nosotros".

 

Un trabajo de equipo para salvar al perro

Ana Pinelo, una de las perreras de la rehala La Catana, propiedad de Antonio Pinelo, narra cómo se produjo el milagroso rescate de Lagartijo.

-"La montería se celebró el sábado en la finca Los Chivatos. A la cacería asistieron rehalas de varias localidades de Huelva, Sevilla y de los pueblos aledaños a la ubicación de la mancha. Nada más finalizar la cacería, tres de los rehaleros comenzaron la recuperación de los perros que no habían vuelto al punto de suelta. Ale Herrera, de la rehala La Catana, así como José Manuel y Yerai, de la rehala El Salchi, se internaron en el monte para buscar a los perros.

Durante el recorrido, se encontraron con los arrieros que estaban sacando del monte las reses abatidas. Los muleros les comunicaron a los cazadores que habían oído los aullidos de un perro en una ladera. Se dirigieron a la zona y consiguieron localizar al cánido. Uno de los canes de la rehala Antonio Carcha estaba atrapado en el interior de un manantial".

El rehalero rescata al perro de otro perrero

"El animal estaba agotado. Su suerte fue un tronco hundido al que se pudo agarrar. Nos avisaron por las emisoras de la situación del perro y que necesitaban cuerdas. Siempre llevo eslingas en el coche, por lo que pueda pasar, así que, acompañada de Manuel Navas y su pareja Carmen, de Rehala Navas, salimos rápidamente en busca de ellos.

Lagartijo, un cruce de podenco y sabueso español, afortunadamente se encuentra a salvo en su perrera, en Higuera de la Sierra, propiedad de la Rehala Antonio Carcha. El rehalero llevaba tiempo tratando de localizar al ejemplar por la señal del collar GPS, pero la profundidad del sitio impedía que diera cobertura. Ale Herrera fue el encargado de sacar al perro de la trampa mortal".

 


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