España, tierra de grandes jabalíes: un cazador toledano abate un cochino de 140 kilos en una espera en una finca abierta
El crecimiento poblacional del número de jabalíes en el país ha convertido en algo habitual el abate de ejemplares de gran tamaño. Los ‘vakamulos’ no solo destacan por su gigantesco tamaño, en la mayoría de las ocasiones también lo hacen por sus espectaculares trofeos.
En estas últimas fechas tenemos constancia de la caza en España de al menos dos machos que han superado en la báscula los 150 kilos. El fin de semana, Alberto Pérez, integrante de la cuadrilla los Pata Negra, abatió un cochino de 190 kilos en El Sabinar, pedanía de Ejea de los Caballeros. En la parroquia del municipio de San Saturnino, en la provincia de La Coruña, los miembros de la Sociedad de Cazadores de Narahío cazaron un macho de 150,5 kilos en batida.
El padre del cazador junto al gran macareno.
Una espera con un final inesperado
Ángel Sánchez es un apasionado a la caza del jabalí en espera. Practica esta modalidad desde que tiene uso de razón. El pasado viernes, en el transcurso de una espera en un acotado de Parrillas, localidad de la provincia de Toledo, tuvo la fortuna de cazar el cochino de mayor tamaño de su trayectoria cinegética.
El peso del gran jabalí, más de 140 kilos.
Tras permanecer varias horas en el apostadero, abandonó la espera. Únicamente entraron en plaza hembras con crías y machos de pequeño porte. Antes de enfundar el rifle y dirigirse al vehículo, decidió echar un último vistazo a los contornos con un monocular térmico. En un claro del monte localizó un ejemplar de gran tamaño. Probablemente el macho que llevaba varios meses intentando abatir.
Abatí el jabalí tras un apasionante rececho
Como, según el cazador, no tenía nada que perder, se aventuró a aproximarse a él ocultándose en el monte. Pese a que la luna iluminaba el campo, los conocimientos del terreno del cazador le permitieron situarse a 120 metros del jabalí. Lo abatió de un único disparo de su rifle de cerrojo Mossberg Patriot del calibre .308 Win. Necesitó un remolque y de la ayuda de su padre para poder transportar el monstruoso cochino.