Un oso ataca al activista por los derechos de los animales que le acaba de liberar
Un animal recuperado tras un atropello se ha convertido en uno de los mayores desagradecidos con los rescatistas que lo trataron y liberaron en su hábitat.
Se trata de Ricky, un ejemplar de oso pardo de dos años que ocasionó un accidente de tráfico en una carretera de Armenia. Fue sedado y trasladado a un centro de rescate de la vida silvestre hasta que se ha curado y recuperado completamente de sus heridas tras dos semanas de internamiento. Entonces, los activistas intentaron convertir el acto de liberación del gran depredador en una publicación para redes sociales. Todo estaba preparado: un entorno abierto para poder grabarlo todo, una jaula que se puede abrir desde arriba y uno de los animalistas, vestido con el uniforme oficial y con los logos bien visibles, como encargado de abrir la jaula y permitir al oso volver a los montes donde debe habitar.
Todo se tuerce y el oso ataca al animalista
Pero los expertos en comportamiento animal nunca habrían realizado la suelta de una manera tan temeraria. Al sentirse libre, el oso da media vuelta y arremete contra la persona que encuentra a pocos metros. Solo la puerta de la jaula evita un primer zarpazo.
Pero el animal no se da por satisfecho y está empeñado en atacar a todo lo que encuentre a su alrededor. El activista sube a la parte trasera de la pickup, cuyo conductor arranca y se aleja del enfurecido animal, que persigue durante unos metros al vehículo. “Este comportamiento salvaje es exactamente lo que queremos ver. Su cautela natural y agresión ayudarán a mantenerlo a salvo en la naturaleza”, aseguran los animalistas en un comunicado tras publicar las imágenes.