¿Imaginas estar paseando a los perros por el parque y encontrarte un gran lobo?
Dos perros ladran asustados ante la proximidad de un gran depredador. Ni la presencia de la propietaria de las mascotas intimida al lobo, que se acerca a olisquear a los canes.
Se trata de un ejemplar joven que parece estar descubriendo nuevos escenarios de caza y nuevas especies sobre las que depredar, como el perro. A pesar de que parece que se aleja asustado de los canes que lo ladran, esta se convierte en la estrategia más repetida de este tipo de depredadores ante especies que pueden suponer cierto peligro para ellos.
Un lobo que intenta que el perro se aleje del ser humano para atacar
En primer lugar, se aproximan a inspeccionar, provocando la respuesta del otro animal, generalmente el más dominante de los que encuentra. A continuación, se alejan fingiendo sumisión o haber sido intimidados. Con esto, despiertan el sentido de persecución, tan arraigado en los perros. Si el perro oscuro del vídeo hubiera estado suelto de su correa, es muy posible que hubiera sucedido esto. Al alejarse del ser humano y del perro que no se atreve a perseguirlo, su táctica habría cambiado radicalmente y se habría lanzado rápida y letalmente sobre su avalentada presa, llevándoselo aún más lejos de su propietario.
El Natural Resources Center, instituto de investigación estatal de Finlandia, donde han sido grabadas las imágenes, ha hecho público que en la actualidad la población de lobo gris en su territorio se compone de entre 150 y 180 ejemplares, aunque el último estudio censal realizado data de 2017. Expertos del país hablan del doble de individuos.
Un lobo habituado a entrar en la ciudad
Distintos medios de comunicación locales informan sobre la aparición de un lobo en el centro urbano de Kirkkonummi, una localidad finesa que encontramos en la parte sur del mapa del país. Cuenta con más de 40.000 habitantes, lo que la convierte en un importante núcleo urbano de la zona. Los vídeos grabados por los vecinos corroboran la información. Sucedió en el aparcamiento de un edificio de apartamentos, junto a la estación del tren local.
La vecina que grabó el vídeo se dirigía al aparcamiento cuando se encontró con el lobo. Cuando bajó del coche, el lobo seguía allí. Ha reconocido que no supo si correr o quedarse congelada. Decidió huir hacia su casa. Cuando llegó, se asomó por la ventana y el animal seguía allí. Avisó a la policía y no tardaron en llegar, pero el animal ya se había ido. Poco después, el animal fue visto en otros lugares de la localidad.
A pesar de que las autoridades aún no han conseguido acercarse al animal, ha trascendido que intentarán abatir al depredador antes de que pueda ocasionar algún daño, reconociendo que llevan recibiendo reportes de acercamientos de un lobo a los vecinos de la localidad desde el mes de septiembre. La ley permite a las autoridades a atrapar o abatir a cualquier animal que suponga un peligro para la vida o la salud humana o incluso un daño considerable a la propiedad. Sin ir más lejos en el tiempo, hace solo diez días un trabajador forestal denunciaba que un lobo le mordió en el brazo mientras reparaba su máquina en Ostrobotnia del Norte.
Imagen del trabajador finlandés que ha denunciado que fue atacado por un lobo.
Un vídeo grabado a principios de este mes de octubre en la misma localidad que el resto que hemos visto ya evidenciaba la falta de respeto de un animal de la especie hacia el ser humano y sus mascotas.
Así describía la experiencia el propietario del perro que vemos en las imágenes:
-“Para su información, hace 10 minutos un lobo empezó a seguirnos cuando estábamos corriendo con el perro en Kirkkonummi, en el cruce de Abrasinmäentie y Teknikontie. Seguimos unos 300 metros hasta llegar al patio y estacionamiento de la empresa constructora.
Momentos después de este encuentro, otro paseador de perros aparentemente se encontró con el mismo lobo a unos 100 metros de donde me encontré y también lo pudo filmar. Adjunto vídeo. Según he podido saber, el lobo también había ido tras un tercer caminante”.