El Seprona sorprende a un grupo de furtivos con 75 tórtolas europeas abatidas en un coto de Écija
Sevilla

El Seprona sorprende a un grupo de furtivos con 75 tórtolas europeas abatidas en un coto de Écija

Una patrulla del servicio de protección de la naturaleza de la Guardia Civil identificó a tres de los furtivos, mientras que dos de ellos lograron escapar en dos vehículos.


Desde el año 2021 está prohibida la caza de la especie en España. Su cupo es 0 en las diferentes órdenes de veda de las comunidades autónomas. La tórtola únicamente se puede capturar con fines científicos en un número reducido de cotos. Pese a que pesa una moratoria en la caza de la tórtola, los cazadores continúan realizando siembras específicas para el ave, manteniendo bebederos y charcas artificiales y cuidando y gestionando los hábitats en los que la especie cría.

Las tórtolas abatidas se entregaron al CREA para que sirvan como alimento para animales en periodo de recuperación

El gabinete de Prensa de la Comandancia de la Guardia Civil de Sevilla informa que una patrulla del Seprona ha identificado a tres individuos en un coto de la localidad sevillana de Écija. Según el instituto armado, en la intervención se han decomisado 75 ejemplares de tórtola europea, las cuáles ya se encontraban muertas. Los hechos ocurrieron a finales del mes de agosto.

Furtivos a la fuga

La patrulla del Seprona de Écija detectó la existencia de un grupo de personas en actitud sospechosa.

Al notar la presencia policial dos de los furtivos huyeron en vehículos dejando 30 tórtolas europeas, una escopeta, dos bancos de caza plegables, un puesto fijo de lona y un collar de perro. Tras inspeccionar la zona los agentes encontraron a tres individuos ocultos en el cauce del arroyo Reinilla. A uno de ellos se le incautaron 45 tórtolas europeas que llevaba en un zurrón. Uno de los detenidos confesó ser el autor de la captura de las aves que había en el interior del morral, aunque alegó que las otras 30 fueron abatidas por los individuos que huyeron. También admitió que la escopeta encontrada junto al material abandonado era suya, aunque dijo que la había prestado a uno de los prófugos.

En el vehículo que quedó en el lugar, los agentes encontraron dos escopetas de caza. La huída de dos de los furtivos ha generado una investigación con el objetivo de localizar a los implicados.

 


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