Temporada de la media veda del año 2024 en España
En esta ocasión no voy a escribir un artículo emulando a la realidad, no, sería muy largo de explicar, además de una barbaridad. Pues yo, con más pasado que futuro, comulgo con la verdad, por eso no me duelen prendas a sabiendas de que nos faltan datos y estudios de cráneos privilegiados a la hora de la verdad.
No vería con malos ojos trabajar para iniciar todo lo necesario a través de un colectivo sensibilizado y multidisciplinar. Me refiero a unos entes venatorios oficiales de esos que, a decir verdad, tienen nuestros ministerios estatales sin recurrir al outsourcing siendo algunos especialistas en robar en un Corral de Monipodio que ya les es familiar a sabiendas de que nada les va a pasar. Me refiero a depredadores silvestres, plagas de topillos, furtivos de toda índole y un largo etcétera de todos conocido.
También quiero tomar como referencia adicional la normativa de un laboreo mediante un “0utsourcing” que clame al Cielo. ¡Qué peines de cosechadoras! ¡Qué empaquetadoras de paja!, etc… etc… Maquinaria que se lleva por delante hasta los jabalíes… cuanto si más a las liebres o a los pollos de codorniz. Muchos de nuestros cazadores y pescadores sólo buscan ganar campeonatos para ser aplaudidos y poco más. Pero lo principal para ellos es llenar la casa de copas de alpaca y diplomas de papel con gran gramaje y poca verdad.
Cambio climático
Es una realidad indiscutible que se ha ido implantando en varios frentes, y ridículas maneras. Sí hombre, me refiero a quienes aportan datos del reclamo mecánico con la red y la disculpa de que están prestando un servicio gratis medioambiental, pero esas codornices ya no se vuelven a ver en un número racional, eso sí, se ven alguna en un número testimonial y sirven para dar pie a colectivos que ya no engañan a nadie pero sí reflejan una triste realidad. ¿Cuántas veces se ha pasado la grada el mismo día que se ha amontonado la paja?
ESCRIBIRÉ LO QUE FOTOGRAFÍE Y PROCEDERÉ EN CONSECUENCIA. Y NADA MÁS. NO.
Grandes periplos coturnos de la temporada 2024
España alberga en su superficie la migración de las aves que vienen a criar y después se vuelven a marchar para proceder a criar en sus tierras de origen igual… De esas que se van cruzándose las unas con las otras sin precauciones para evitar las muchas que se llevan por delante diversos colectivos. Motivo este por el que en los pasos por los que tienen que transitar bandos de ida y contrapasa. Bandos conocidos por todos los cazadores, así como por todas las aves de paso, obedeciendo siempre a la meteorología del día de pasa o contrapasa. Aves que se juegan la vida con los molinos eólicos, con la energía osmótica, con las líneas aérea y con mil cosas más.
Es cierto que la torcaz ha crecido de una manera desmesurada. Tanto es así que en ciudades como: Valladolid, Palencia, Burgos, Vitoria, Madrid, etc. etc. entre otras, han tenido que proceder a sacrificarlas hasta llegar a un número que hace las delicias visuales de los cazadores y el tiroteo diurno y nocturno de los “matabichos remunerados” que están sustituyendo por sofisticadas trampas tales como comidas en cajones anclados en lugares estratégicos, fusiles que lanzan redes a montones de grano donde ceban a las palomas con cuidado para que éstas no sustituyan a las ratas, etc. etc. Lo antes escrito: es un inicio de las diferentes clases de paloma, su caza y algo más.
RESUMIENDO: Palomas habrá. Menos que el año pasado por la cosa de la climatología, pero habrá.
Ah, esos alambres en punta que hay en las iglesias, catedrales, ermitas, etc. etc. los ponen para que no se posen las palomas de palomar (las mansas y les dé por defecar). No, no les voy a citar todas las razas de palomas. EN MI CASA HUBO PALOMAR Y EN LA DE MI ABUELO, TAMBIEN.